“El 95% de las cosas de las que me río tienen que ver conmigo mismo”
Si alguna vez te has mirado en el espejo del ascensor cuando salías a correr a las 6 de la mañana y te has preguntado qué haces con tu vida, tranquilo: no estás solo en este dilema. Así te lo hace saber Javi Sancho, que este sábado día 15 de octubre a las 20:30 presenta en el Teatro Auditorio su espectáculo “Del deporte también se sale”. Un equilibrio entre humor, deporte y, por qué no, la vida en general. Estudios afirman que reírse de 10 a 15 minutos puede quemar de 10 a 40 calorías, así que ya no hay excusa para no “ejercitar” este fin de semana.
Del deporte se sale, ¿pero tú cómo entras?
Entro hace años porque me gustaba el deporte desde pequeño. Probé el fútbol, se me dio mal… me gustó la bici, se me dio mal… (Risas) Pero lo alargué muchos años más, porque me lo pasaba muy bien. Siempre ha sido ir probando y disfrutándolos sin acabar de destacar en ninguno.
¿Y cómo empiezas con el running y los vídeos humorísticos?
Empiezo por una entrevista que le hago a Pau Capell, de los mejores del mundo de trail running. Nos llevamos muy bien, un día me regala unos bastones de trail y me da por hacer un vídeo de cachondeo con ellos. Se publica, se lía muy gorda y entonces me veo en la situación de que tengo que empezar a correr porque a la gente le gustan esos vídeos, y paso a vivir hipotecado con el running y el humor. Con lo bien que estaba yo con mi humor tranquilito en mis monólogos, ahora paso a tener que estar en forma para poder hacer reír… entonces se me complica mi carrera profesional.
¿Cómo ha evolucionado tu espectáculo ‘Del deporte se sale’?
Este es el tercer y último año que lo hago. A mí me gusta mucho improvisar en los espectáculos, algunos días improvisas alguna cosa que me gusta cómo queda y eso pasa a formar parte del espectáculo. He calculado y más o menos queda un 30% de lo que era el espectáculo al principio. El otro 70% lo he ido cambiando sobre la marcha con cosas que me han gustado, más actuales. También porque de cara a mí, que estoy todos los fines de semana haciéndolo, también es necesario ir cambiando.
Hablas no solo de deporte, sino de la vida en general
El deporte es un poco la excusa, pero empiezo a explicar, como digo yo, mis mierdas, porque todos las tenemos. Es un coaching que le regalo a la gente para que vean que ellos no están tan mal. La verdad es que es un espectáculo que lo he enfocado para todos lo públicos. La parte de deporte la va a entender gente que no ha hecho deporte en su vida, no hago nada específico. Lo hago todo el espectáculo enfocado a que cualquier persona, desde una señora mayor hasta un chaval jovencillo, sean aficionados o no al deporte, puedan disfrutarlo.
“Hago el espectáculo enfocado para todos los públicos. Desde una señora mayor hasta un chaval jovencillo, sean aficionados o no al deporte, pueden disfrutarlo”Se te califica como el runner que se ríe de los runners. ¿Qué importancia le das a saber reírte de ti mismo?
Es verdad, es que al final, el 95% de las cosas que me río tienen que ver conmigo mismo, de lo ‘desgraciao’ que soy corriendo, las sensaciones que tengo, hiperventilando sin necesidad porque tengo wifi en casa y un sofá... Creo que los vídeos han funcionado porque me río de una manera que a los que lo practican amateur o profesional les hace gracia porque son cosas que han pensado todos ellos. No es de manera ofensiva, es más de: ¿Qué necesidad hay de salir a correr un domingo a las 6 teniendo todo el día? Después me vienen runners profesionales y aficionados y me dicen: “Javi, es que es verdad, desde que vi tu vídeo y salgo a correr a las 6 de la mañana salgo destemplado, porque no son horas de salir”. La clave es que me río de los runners, pero de una manera que dicen: “No podemos llevarle la contraria a Javi porque somos unos ‘desgraciaos’”.
Pusiste a correr a Andreu Buenafuente en un famoso vídeo. ¿Habrá que llevarse zapatillas para ir a verte?
(Risas) No, en el Auditorio voy en modo tranquilo. Si lo que le puede condicionar a la gente para comprar o no la entrada del espectáculo es verme en lycra, les tengo que dar la alegría de que no me van a ver en lycra. Por esa parte pueden venir muy tranquilos, que no va a pasar.
Importante ahora, más que nunca, espectáculos de este tipo, que te hagan desconectar de todo por un rato
Tienes toda la razón, y además una de las normas que me marco es que no me gusta tocar nada de actualidad a nivel de noticias. Ni guerra, ni pandemias, ni subidas de precios. Podría hacer humor sobre ello y seguro que funcionaría, pero lo que busco es que durante esos 90 minutos no tengamos inputs de aquello con lo que nos están ametrallando todo el día la cabeza. Me estoy encontrando que la gente sale contenta por eso, porque en un momento en el que tenemos tantos inputs negativos, estar hora y media en la que todo son risas y que no tocas temas que tenemos muy trillados, es una alegría.
¿Qué último mensaje le lanzas al público para animarse?
El Auditorio es espectacular, si no han ido tienen que ir para verlo. Ya solo por eso, a nivel museo, cómo está estructurado, merece la pena la entrada. Pero como no se sabe el tiempo que va a hacer, si va a llover o hacer fresco, al final es hora y media que te garantizas que vas a estar bajo techo, en unas butacas cómodas con temperatura idónea. Y, sobre todo, que se van a reír mucho. Pero que la entrada ya vale la pena por ver el Auditorio y por estar 90 minutos con estabilidad climática, que no es mala opción como inversión de decir: “Mira, me resguardo aquí”.