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“Tras ver nuestra obra, muchos dejan las habitaciones de hotel más recogidas”

La compañía A Panadaría, que estará en el Auditorio 'José Luis Perales' este jueves, lleva a la comedia las condiciones laborales de las camareras de piso
“Tras ver nuestra obra, muchos dejan las habitaciones de hotel más recogidas”
Ailén Kendelman, Areta Bolaro y Noelia Castro durante la representación de la obra. Foto cedida
05/03/2025 - Rubén M. Checa

Imagina que haces una reserva en un hotel y, después de pagar 300 euros la noche, al llegar, está la habitación sin limpiar, como la dejaron los anteriores clientes. Desde el alojamiento te piden disculpas y te ofrecen un descuento de 2,5 euros en la reserva, lo que cobra la limpiadora. ¿Lo aceptarías? Esta es la premisa de la obra de teatro ‘Las que limpian’, creada por A Panadaría en coproducción con el Centro Dramático Nacional que llega al Teatro Auditorio José Luis Perales de Cuenca el jueves 6 de marzo a partir de las 20:30 horas. Ailén Kendelman es co-autora y co-directora de la obra junto a Areta Bolado y Noelia Castro.

 

¿Qué se va a encontrar el espectador?

Una sátira, una comedia en la que ponemos sobre las tablas la lucha de las camareras de piso de los hoteles, conocidas como las Kelly para mucha gente, que reclaman y reivindican unos derechos sociales y laborales justos. La ficción se desarrolla en una isla de Galicia, en un hotel balneario donde se ven todas las problemáticas que ellas tienen: las quieren externalizar, enfermedades que no se reconocen como laborales cuando sí lo son, etcétera. Además, encontramos en la ficción la cara B, el director de hotel que las precariza, que las externaliza porque reduce gastos y un político, sin nombre propio, que hace negocios con el empresario. Política y empresario de la mano en frente de estas mujeres. Una ficción para hablar de un tema que es real. 

 

¿Hacéis al público partícipe?

Sí, hay bastante participación. En varios momentos, ellos son limpiadoras de hotel al igual que varios personajes. Además les hacemos partícipes en varios momentos, como las votaciones o una manifestación, en la que todo el mundo termina gritando ‘Aparicio explotador’. Se genera mucha comunicación, y es muy bonito, porque siempre se entrega bastante. A veces, en otros momentos de la obra, gritan al empresario de forma espontánea. Cosas bonitas no son (risas). Es muy bonito ver la comunión que se crea entre espectadores y actrices.

 

¿Cómo surge la obra?

A raíz del confinamiento, cuando todas las compañeras estábamos encerradas en casa. Teníamos que pensar en el próximo espectáculo, y una de las compañeras propuso el tema. Nos pareció que encajaba muy bien porque estábamos en un momento en el que a las ocho de la tarde todo el mundo aplaudía a los trabajadores del sector sanitario, pero poco se hablaba de las que limpiaban. Además, muchas de estas empleadas lo hacen sin contrato, por lo que no tenían ayudas, y nos pareció que era muy necesario abordar esta temática. 

 

 

“El 98% de las limpiadoras de hotel son mujeres y esta reivindicación era muy necesaria”

¿Sentían que este problema era, en cierto modo, invisible, y no estaba tan presente en el día a día?

Sí. Absolutamente. Nosotras decimos que el 98% de las personas que limpian los hoteles son mujeres. Por eso, el espectáculo se llama ‘Las que limpian’, porque es abismal la diferencia, una barbaridad. Son trabajos esenciales, pero que están en la sombra. Nadie querría ir a un hotel en el que te digan “mira, si pagas 2,50 menos, no te hacen la habitación, te sale más barato, pero estás en una estancia sucia”. Nadie querría ni aceptaría algo así. Esta cantidad es, de media, lo que cobran las limpiadoras. Entonces, es un trabajo esencial porque a todo el mundo le gusta encontrarse con una habitación impoluta, pero es un trabajo poco valorado tanto socialmente como económicamente. 

 

¿Hablaron con muchas limpiadoras de hotel para crear la obra?

Sí. Era importantísimo para crear el espectáculo tener testimonios de primera mano. Hicimos muchas entrevistas a trabajadoras de diferentes partes del Estado Español, para ver si las reivindicaciones cambiaban según la comunidad, pero no, todas tenían los mismos problemas y reivindicaciones. Fue genial tener contacto directo con ellas, y nos contaron situaciones muy dramáticas pero con mucho humo, algo que ayudó a hacer este espectáculo con ese tono cómico. 

 

¿Cuál es su puesta en escena?

No hay ni grandes decorados ni grandes escenografías, hacemos una simplificación porque queremos ir a lo esencial de lo que estamos contando. Aquí habrá unos cortinones, unas moquetas que simbolizan el pasillo infinito del hotel y no puede faltar un carro de limpieza. Con estos elementos ya podemos recrear lo que nos interesa. Además, usamos varias pelucas para los distintos personales. Con imaginación, podemos hacer mucho trabajo. 

 

 

 

En 2022 se estrenó la obra. ¿Cómo está siendo la recepción del público?

Llevamos unas 200 funciones y está siendo una acogida muy buena. Nos han dado siete premios, por lo que estamos muy agradecidas. Es muy bonito cuando vienen camareras de piso a ver la obra, porque se sienten muy identificadas, pueden ver todo lo que nos dijeron. El resto del público luego nos ha dicho que, a raíz de la obra, cuando van a un hotel, ya dejan las habitaciones más recogidas. Nosotras estamos muy contentas. 

 

Ahora que estamos en la semana del 8M, ¿alguna reivindicación?

Son muchas. Primero, que las mujeres nos podamos dedicar a lo que nos podamos imaginar. A día de hoy, en el sector teatral, hay pocas mujeres en puestos técnicos. Mi pregunta es por qué hay pocas… Fuera del teatro, no se me ocurre en mujeres electricistas o fontaneras. ¿Por qué hay trabajos que son para hombres y otros para mujeres? A parte, reivindicar también todo el acoso que recibimos: laboral, sexual… Lo vemos día a día, que pasa en el fútbol, en el trabajo o a una limpiadora, y parece que la ley que no está preparada para atender estas necesidades. Las mujeres estamos un poco hartas, queremos estar tranquilas y que nos dejen vivir. 

 

¿Un mensaje para el espectador?

Es una obra muy divertida, que hará reír y reflexionar, incluso llorar. La crítica que recibimos es muy positiva, y es una obra interesante.