Era de esperar. La Covid-19 ha desplomado las ventas de vehículos en el conjunto del país. En la provincia de Cuenca, en marzo se formalizaron 74 matriculaciones de turismos y todoterrenos frente a las 208 registradas el mismo mes del año anterior, lo que supone una caída de un 64,42%, según el último informe estadístico de Fancauto, la patronal que integra asociaciones de concesionarios oficiales de las marcas automovilísticas y de maquinaria agrícola del mercado.
No obstante, en comparación con las otras provincias de Castilla-La Mancha, el descenso en Cuenca, aunque acusado, ha sido el más bajo, frente a las caída del 73,55% en Ciudad Real; del 72,73%, en Guadalajara; y del 68,48%, en Albacete. Los datos de Toledo no aparecen en esta estadística.
El informe de Fancauto concreta que, de estas 74 matriculaciones contabilizadas en marzo, 62 corresponden a vehículos de particulares; once, de empresas; y una, de alquiladores.
En la variación interanual se observa que las ventas de vehículos de particulares descendieron un 63,74%, al haberse matriculado 171 turismos y todoterrenos en marzo de 2019.
Por su parte, en el apartado de matriculaciones de coches de empresa, se produjo una bajada del 70,27% , puesto que en ese mismo mes del ejercicio anterior se vendieron 37 vehículos. Sin embargo, el año pasado no hubo ninguna venta de turismos y todoterrenos en marzo frente a la unidad comprada en 2020.
En cuanto a la variación mensual, las ventas también se redujeron en relación con febrero, habiéndose pasado de los 166 vehículos matriculados aquel mes a los 74 de marzo, un 55,42%.
En marzo se formalizaron en la provincia de Cuenca 74 matriculaciones de turismos y todoterrenos, frente a las 166 de febrero y a las 208 del tercer mes de 2019El acumulado de matriculaciones de este año también desciende: en los tres primeros meses del año se han puesto en la calle 417 vehículos frente a los 623 del mismo periodo del año anterior, lo que representa una disminución del 33,07%.
La bajada en ese periodo en la venta de vehículos de particulares fue de un 30,32% (347 matriculaciones frente a las 498 de ese periodo del ejercicio anterior) y en los coches de empresa, de un 44,35% (69 en contraposición con las 124 del acumulado de 2019). En los dos años, se había vendido una unidad de turismo para alquiladores.
Para la patronal de concesionarios, este histórico descenso en las ventas de vehículos obedece claramente al parón de la actividad en nuestro país debido al estado de alarma que se decretó a mitad de marzo para intentar frenar a la Covid-19. De cara al futuro, consideran que va a ser necesario un plan de choque de relanzamiento del sector para animar las operaciones.
De todas formas, el sector del automóvil no pasaba por un buen momento ya antes de la crisis de la Covid-19. De hecho, en la provincia de Cuenca, se registró en febrero una bajada de un 6,21% de las matriculaciones respecto a enero y la variación interanual reflejaba un descenso del 19,42% en las ventas. El acumulado en los dos primeros meses de 2020 también acusó una disminución del 17,38% respecto a ese mismo periodo del ejercicio anterior.