El sector vitivinícola de la provincia ha realizado durante los últimos años un importante avance tecnológico y de calidad para adaptarse a las necesidades de las nuevas exigencias del mercado. Ahora, el reto pasa por buscar nuevos nichos de mercado en terceros países, una asignatura en la que trabajan con intensidad las bodegas y cooperativas de la provincia, donde la unión comercial está cobrando fuerza, sobre todo teniendo en cuenta el aliciente que suponen los incentivos económicos de Castilla-La Mancha en líneas de ayuda como el Focal o el programa Vinatis.
El objetivo está claro, “apostar porque nuestros vinos lo conozcan en todo el mundo y sigamos avanzado en muchos mercados que están aún por explotar", señala el director provincial de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Joaquín Cuadrado, quien destaca que "hay aún muchos países en los que se puede avanzar aún en cuanto a cuota de mercado”.
Así las cosas, además de las uniones que ya han fructificado, muchas cooperativas de la provincia están manteniendo reuniones y viendo la posibilidad de unir fuerzas con otras para fortalecer el músculo comercial. Y ese, por ejemplo, es el caso de la Bodega ‘PedroHeras’, de la cooperativa San Isidro Labrador de Las Pedroñeras.
De momento no se ha llegado a ningún acuerdo, dice su presidente, Augusto Mesas, aunque es algo que no se descarta.”La competencia del mercado es dura. En años de poca cosecha mundial, como es este caso, es positivo unir fuerzas para aumentar la oferta, pero también es importante que se puedan crear estructuras comerciales fuertes”.
Mejorar la calidad es otro de los pilares fuertes para seguir mejorando, y por eso, la Bodega PedroHeras se ha subido al carro del pago diferenciado por calidad. “La campaña pasada teníamos el sistema a prueba en la próxima ya entrará a funcionar totalmente, añade Mesas, que además destaca que la cooperativa no deja de realizar mejoras en sus instalaciones con las técnicas más avanzadas en todos los procesos de elaboración.
En este sentido, señala que en estos momentos se está negociando la sustitución de dos prensas continuas por otras neumáticas. Ya el año pasado se hizo una sustitución y el objetivo, dice, es cambiarlas todas.
“La calidad es el mejor instrumento que tenemos para seguir avanzando en el mercado. Tenemos un buen producto y es necesario que cuidemos todos los aspectos. Desde la recolección, a la obtención de los mostos y del producto final”, apostilla el presidente de la bodega pedroñera, quien incide además en la importancia de la promoción y de la imagen con la que se presentan los vinos.
En este punto, avanza que los vinos de Bodegas PedroHeras cambiarán su imagen en breve. Ya se está trabajando en los nuevos diseños, tanto de las botellas de las distintas variedades y marcas “que queremos que sean uniformes”, como en las etiquetas. Hace solo dos años que mejoran su imagen corporativa. Ahora se da un paso más buscando una imagen “que nos identifique”.
Reconocimiento Internacional
Durante los últimos años la carrera de los vinos de la bodega PedroHeras no para de crecer. El volumen que destina al comercio exterior se ha ido incrementando hasta alcanzar el 80% de la producción. Se han abierto nuevos mercados y el embotellado, aunque tiene una proporción mínima respecto a la producción, también ha aumentado considerablemente y ,sobre todo, ha crecido en premios y reconocimientos en el plano internacional.
Los últimos los en los prestigiososo premios Bacchus, con una plata para el Tempranillo, y también en el Vinalies Internationales, celebrado a principios de marzo en Paris, donde el PedroHeras Airén se alzó con otra plata. Un importante premio otorgado por un jurado integrado por un centenar de expertos procedentes de los cinco continentes, que ha catapultado al emblemático blanco pedroñero a formar parte de la prestigiosa guía ‘Hachette’’donde figuran los mejores vinos del mundo.
Otro premio conseguido recientemente que ha sido muy significativo es el oro para el Aique Macabeo otorgado en el Concurso Sub 30 celebrado en Madrid, y lo es, dice Mesas, porque la elección de este nuevo vino que ha salido este año ha sido realizada por jóvenes, un importante segmento de población que se quiere atraer al mundo del vino. A todo esto, se suma el oro del Tempranillo crianza 2015 que le otorgaba el jurado del concurso regional Vinos de la tierra del Quijote. El círculo lo cerraba en Cuenca con un oro para el PedroHeras Tinto Syrah- Tempranillo 2017.