La reina del trampantojo culinario conquense, Verónica Recuenco, vuelve a reinventarse. Esta vez no ha editado una nueva versión de los famosos zarajos dulces sino que ha puesto en marcha un servicio de comida tradicional y casera bajo el nombre de ‘Hoy cocina la Vero’ que los clientes pueden recoger en su tienda Degustacuenca.
Está claro que en apenas siete meses el panorama ha cambiado radicalmente para el sector hostelero y los pequeños comercios, por eso muchos negocios han decidido sacar su propia linea de platos preparados take away (para llevar) para conseguir nuevos ingresos económicos, una alternativa de negocio para mirar hacia el futuro.
Por su parte, Verónica Recuendo ofrece comida casera de jueves a domingo porque “es cuando más movimiento hay en el Casco Antiguo”. El menú varía cada día y pone a disposición de los clientes varios primeros, segundos y postres para que puedan elegir. Además, pueden comprar incluso la bebida o probar platos típicos conquenses puesto que en la tienda que regenta junto a su marido siguen ofreciendo los mismos productos de siempre.
“Siempre he tenido buena mano para la cocina y los vecinos del barrio me han apoyado para comenzar este proyecto, reclamaban este tipo de servicio para el Casco Antiguo” aunque, si bien es cierto que no solo acuden conocidos sino que los turistas alojados en apartamentos turísticos buscan esta opción, “quizá porque tienen miedo a las aglomeraciones en los restaurantes o prefieren disfrutar de la comida de siempre o de un buen caldo ahora que llega el frio”, apostilla.
Los platos de cuchara como las judías, el cocido o las lentejas son su especialidad pero en la carta también hay diferentes variedades de pasta, guisos de carne, pescados y entrantes típicos conquenses como el ajo arriero. “Tambien tengo clientes que por teléfono o por Facebook me encargan tortillas, paellas o guisos para alguna reunión familiar o porque simplemente no quieren cocinar el fin de semana y si me avisan con antelación también estoy disponible el resto de días de la semana”.
Siendo consciente de la situación sanitaria que atravesamos, utiliza envases de plástico de un solo uso que desinfecta antes de entregarlos al cliente en bolsas individuales y utiliza mascarilla y guantes durante el cocinado para evitar cualquier tipo de contagio por Covid. Una medida que no es nueva sino que ya estaba establecida por los registros sanitarios habituales al obtener la licencia sanitaria cuando comenzó a vender las morcillas o el salchichón de chocolate.
Yo misma hago la compra, selecciono los mejores ingredientes o los productos de temporada para cocinarlos como si estuviera en mi propia casa
Esta mujer emprendora comenzó con la iniciativa el pasado jueves a propósito de los días festivos por la Fiesta Nacional de España ante la buena previsión turística y las ventas han superado sus expectativas, “ha sido un éxito y agotamos la mayoría de los platos, sobraron muy pocas raciones”, comenta.
Ante la difícil situación económica que atraviesan muchas familias ha ajustado los precios lo máximo posible para animar a la gente a comer caliente y de calidad sin tener que cocinar en casa. La clave de ‘la Vero’ está en la experiencia y es que esta conquense desciende de una conocida saga hostelera conquense, aunque reconoce que la buena mano de su madre para la cocina se le ha contagiado. Una autodidacta que apuesta por el producto fresco, comprado y cocinado en el mismo día para ofrecer la máxima calidad en sus elaboraciones. “Yo misma hago la compra, selecciono los mejores ingredientes o los productos de temporada como si estuviera en mi propia casa”, destaca.
Para el futuro sueña con repartir incluso a domicilio si el negocio comienza a andar y funciona con éxito. Una adaptación que revitaliza y aumenta la oferta gastronómica del Casco Antiguo de la ciudad.
