En 2020, la generación de valor de Incarlopsa, compañía castellanomanchega líder en la producción y elaboración de productos cárnicos porcinos, se ha situado en 693,3 millones de euros, que supone un incremento del 2,7% respecto al ejercicio anterior y representa un 1,8% del PIB de Castilla-La Mancha. Esta es una muestra del compromiso de la compañía con el desarrollo económico y la generación de valor en torno a sus 10 núcleos de producción, situados en el medio rural español.
La generación de valor es uno de los aspectos que se recogen en el Informe de Sostenibilidad correspondiente al ejercicio 2020. El documento, además de informar sobre los principales resultados financieros de la compañía y su desempeño no financiero, incluyendo ambiental, social y de gobierno corporativo (ESG, por sus siglas en inglés), analiza y recoge por primera vez su contribución a 11 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Entre los esfuerzos realizados, destacan sus aportaciones a: ODS 2, Hambre cero; ODS 9, Industria, innovación e infraestructura, ODS 11, Ciudades y comunidades sostenibles; y ODS 12, Producción y consumo responsables.
El Informe es un reflejo del esfuerzo de la compañía por impulsar una actividad económica, ambiental y social responsable que impacta de manera positiva entre todos su grupos de interés. Dicho esfuerzo parte de un gobierno corporativo estable, un sólido compromiso con la calidad y la seguridad, una importante apuesta por la innovación y una gestión ambiental en la que destacan la economía circular y los recursos destinados a minimizar el impacto de su actividad.
Compromiso con los proveedores locales y con su equipo humano
Incarlopsa apuesta por la contratación de proveedores de proximidad para el suministro de materia prima y de prestación de servicios. Así, el grueso de la generación de valor de Incarlopsa procede de las compras de ganado a sus 44 proveedores españoles. En 2020 destinó a esta partida 452,3 millones de euros, un 6,8% más que en 2019.
Ese impacto positivo se extiende a otras áreas de su actividad, como es su compromiso con la generación de empleo estable en las zonas en las que ejerce su actividad, contribuyendo a fijar población en el ámbito rural. En 2020 la compañía contaba con 2.440 trabajadores, un 1,5% más que en 2019, de los que cerca del 74% tenían contrato indefinido, frente al 65% de 2019. El 33% de los trabajadores de Incarlopsa en 2020 eran mujeres.
En relación a su desempeño ambiental, la compañía ha establecido diversos objetivos estratégicos en su plan “Visión 2022”, que marca su hoja de ruta para los próximos años.
En 2020, Incarlopsa ha disminuido en casi un 15% su volumen de emisiones de CO2e en relación a 2019 y su gestión de residuos ha evitado la emisión de 3.909 t de CO2e gracias al reciclado de sus envases. También ha reducido en 96.000 kilos el desperdicio alimentario y en un 7,4% el vertido de aguas residuales relativo a su producción, entre otros.
Finalmente, en un año marcado por la pandemia, la compañía ha duplicado los recursos destinados a su compromiso social hasta 584.000 euros. Incluye la donación de más de 54.000 kilos de alimento, 1 ambulancia y 85.000 unidades de material sanitario. En el ámbito deportivo, la compañía reforzó su compromiso apoyando diferentes proyectos dirigidios a la población joven y a la promoción de hábitos de vida saludable a través del deporte, entre otros.
SOBRE INCARLOPSA
Incarlopsa, empresa familiar de capital 100% español con más de 40 años de historia, es un referente en el sector cárnico en España. Con sede en Tarancón (Cuenca) y 10 centros productivos en Castilla-La Mancha, Castilla-León, Andalucía y la Comunidad Valenciana está especializada en la elaboración de productos cárnicos porcinos frescos, curados e ibéricos.
El equipo humano de Incarlopsa se ha duplicado en los últimos años. Actualmente el grupo genera más de 4.180 empleos directos e indirectos.
Incarlopsa cuenta con un modelo de producción vertical que garantiza una trazabilidad total del proceso productivo y la máxima calidad del producto. La calidad, la seguridad alimentaria y el respeto al medioambiente articulan un modelo de gestión sostenible líder en su sector, en el que la innovación desempeña un papel fundamental.