El 60% de la producción de la bodega Carril Cruzado, ubicada en Villagarcía del Llano, se vende fuera de España. La fuerte apuesta por el mercado exterior de este negocio ha valido a su gerente, Fernando Moreno Tórtola, de 32 años, el accésit en la categoría de Internacionalización de los premios de la Asociación de Jóvenes Empresarios (AJE) de Cuenca.
“Es un orgullo este reconocimiento al trabajo de nuestra empresa familiar y fomenta las ganas de seguir luchando. Lo recibo yo porque soy la cara visible pero detrás hay un gran equipo de personas, empezando por mis padres, Fernando y Consuelo, y mis hermanos, David y Consolación, y continuando por todo el personal. Los enólogos, comerciales, técnicos... Todos remamos en la misma dirección”, subraya.
La bodega, construida en 1956, fue adquirida en 1995 por sus padres, restaurándose en los años posteriores las instalaciones, que estaban bastante deterioradas. Un jovencísimo Fernando Moreno se incorporaba a la empresa en 2014, cuando se abrió una nueva línea de negocio, un salón de eventos en el que la cultura del vino se funde con las celebraciones que se realizan en las dependencias.
La finca, de cien hectáreas de viñedo ecológico, alberga ocho variedades de uva. En blanco, cuentan con chardonnay, sauvignon blanc y macabeo, mientras que en tinto tienen cabernet sauvignon, syrah, merlot, petit verdot y tempranillo. “Son sobre todo variedades internacionales pensando en la exportación. Hemos llegado a 14 países”, explica Fernando.
En una apuesta por el medio ambiente, el 70% del embalaje de sus productos está elaborado con material reciclado.
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