‘La Cabaña’: tradición y vanguardia desde el corazón de Alarcón
Con una cocina apegada a la tierra y a la tradición pero con un marcado carácter innovador que se adapta a los tiempos, el restaurante La Cabaña fundado por Raúl Poveda en Alarcón, ha sido una de las propuestas reconocidas en la IV edición de los premios ‘Broches Gastronómicos’, un galardón otorgado por la Academia de Gastronomía de Castilla-La Mancha que busca destacar la calidad de los restaurantes en zonas rurales con poca densidad poblacional o en riesgo de despoblación.
Para Poveda, este reconocimiento que incluye a La Cabaña en la red de establecimientos de la organización supone “una satisfacción enorme” tras años de trabajo, tanto a nivel personal como profesional, un esfuerzo que agradece a todo su equipo.
Desde su apertura hace casi dos décadas, La Cabaña ha evolucionado hasta convertirse en un referente culinario. Fundado en un contexto donde la única oferta gastronómica en Alarcón pasaba poco más que por el Parador Nacional de Turismo, este restaurante nació como una apuesta por revitalizar la localidad natal de su familia. “Quería crear un espacio gastronómico diferente que se adaptara a las necesidades de la época y mirara al futuro”, explica Poveda, quien por aquel entonces vivía en Valencia.
La propuesta culinaria de La Cabaña ha transitado desde las recetas tradicionales hasta las tendencias más actuales, adaptando sus platos a formatos más accesibles y con un fuerte énfasis en los productos locales. Su plato estrella, el ajo cocido, es un homenaje a las raíces gastronómicas de la región, rescatado para deleitar a los comensales. “Es uno de los platos más solicitados y mejor valorados por nuestros clientes”, señala el fundador.
A pesar de su evolución, Poveda y su equipo mantienen una filosofía sencilla, basada en el cariño y el esfuerzo diario. “No trabajamos con pretensiones, pero sí con la ilusión de seguir creciendo y disfrutando de lo que hacemos”, afirma.
Aunque ha recibido propuestas para convertir su restaurante en una franquicia, Poveda lo tiene claro: “no quiero que La Cabaña salga de Alarcón”. Para él, la esencia del restaurante está intrínsecamente ligada a este municipio de La Manchuela, un lugar que describe como “un orgullo para Castilla-La Mancha” por su riqueza cultural y turística.
Con 176 habitantes según el Instituto Nacional de Estadística en 2024, Alarcón es un enclave que atrae a visitantes por su historia, su entorno y ahora, también por la “alta costura de sus restaurantes”, como califica Poveda su propuesta culinaria. “Espero mantener este proyecto aquí el mayor tiempo posible y seguir siendo un referente para quienes nos visiten”, concluye el restaurador, quien ha agradecido a sus clientes el apoyo recibido durante todos estos años.