Derrota del FS VivoCuenca ante el Futsal Villarrobledo por 2 a 6. Perdonaron los azulones en algunos momentos de la primera mitad y lo pagaron en la segunda, donde no estuvieron tan incisivos. Aprovecharon los visitantes para matar a la contra el partido y dejar en mitad de la tabla a un VivoCuenca que poco se jugará estas últimas jornadas.
Salían bastante decididos ambos conjuntos al encuentro: en el caso del Villarrobledo, lo hacía espoleado por una numerosa afición posiblemente la más poblada de los equipos que han visitado El Sargal esta campaña. Eso no amedrentaba a un VivoCuenca que se apuntaba un tanto en el marcador con el primer zarpazo que tenía: balón para Valen en banda derecha y éste se la cedía a Ivi, que, en el área pequeña, no perdonó a la hora de rematar de primeras abajo y a una esquina para el 1-0.
La tendría Budia con un disparo abajo que detenía el meta y, en el rebote, llegaría el visitante Alberto para detener el balón bajo la línea de gol. Minutos después también la tenía Peñu, que en un rebote tras un saque de portería de Mario Gómez casi daba la sorpresa. Tenía que emplearse también el meta cordobés, estirándose con todo para despejar una buena culminación del dorsal 7 villarrobletano.
Una combinación entre Ivi, Valen y Dani Martínez casi significaba el 2-0, y a punto estaba de hacerlo también un enorme trallazo de Peñu que reventaba la madera en la siguiente jugada. Detuvo Mario Gómez una buenísima ocasión para Miguel, que se desesperaba tras la acción.
Budia regateaba en una casilla de ajedrez para cedérsela a Adrián, quien a punto estaba de poner el segundo. Lo estaba mereciendo más el equipo azulón, que se había empeñado en aumentar la ventaja antes de irse al descanso. Quizás por eso fue todavía más cruel el empate del equipo blanco: Óscar, tras recibir de banda derecha, sorprendió con un seco y lejano disparo que supuso el 1-1.
Respondió el combinado de Manolo Moya en el 19: Valen le puso un balón excelente a Peñu en boca de gol y este aprovechó para el 2-1. Cuando todo parecía abocado a este resultado al descanso, los villarrobletanos empataron de nuevo a falta de 20 segundos. Era Joaquín quien aprovechaba un balón enviado al área pequeña para meter la bota y firmar el 2-2.
Partido muy movido también en la segunda mitad: tomaban la delantera los blancos después de que, en un saque de banda, el visitante Miguel se encontrase completamente solo en el área pequeña para el 2-3. Despiste defensivo que salía caro y que pudo ser todavía peor después de que Santi casi anotase en la jugada inmediata, si bien Gómez despejó la acción. Apretaba con todo la afición del Villarrobledo, haciéndose notar en el pabellón conquense y estallando con el 2-4 de Tornero, que recibía completamente solo de nuevo en boca de gol y a puerta vacía.
No estaba tan incisivo ahora el equipo vivero, que más bien resistía los envites de un Villarrobledo en busca del quinto. El reloj jugaba en contra de los locales, que se desesperaban por reducir la distancia. En este contexto, utilizarían los locales la táctica de portero-jugador, aunque una pérdida propia acabó por condenarles al recibir el 2 a 5 desde el propio campo visitante. José Joaquín pondría el sexto en esta situación de un volcadísimo VivoCuenca.
Finalmente, los tres puntos viajaban para Villarrobledo, que mete presión por el segundo puesto –que otorga derecho a disputar los playoffs de ascenso-. El VivoCuenca se mantiene de momento en el séptimo puesto, zona tranquila de la tabla, si bien las ambiciones del equipo azulón son más altas y sin duda querrán responder a ellas la próxima temporada. El siguiente compromiso de los de Manolo Moya será la próxima semana ante el Salvatierra FS.