El Incarlopsa Cuenca disputará su quinto partido de seis partidos en el mes de febrero antes del parón de marzo por la Copa del Rey.
El equipo de Lidio Jiménez, aún con retales de cansancio y moratones tras el exigente enfrentamiento doble ante el Ángel Ximénez Puente Genil la pasada semana, afronta este sábado, a las 17:00 horas y con el arbitraje de Jesús Álvarez Menéndez y José Carlos Friera Cavada, todo un “partido trampa” ante un Liberbank Cantabria Sinfín que se juega seguir el año que viene en la máxima categoría del balonmano español.
En la previa, el técnico del Incarlopsa Cuenca ha advertido del potencial y el progreso que está encontrando el Sinfín, “un equipo que ha ganado a Logroño, que ha sido capaz de empatar en Puente Genil y de sumar un punto a domicilio en Nava después de ir ganando todo el partido. Llevan una segunda vuelta espectacular, es un equipo joven y en los últimos partidos la portería les está respondiendo muy bien. Al final, a estas alturas de competición todo el mundo se está jugando algo y muchas veces los equipos de abajo te exigen más que los de mitad de tabla”.
Con esto, Jiménez recordaba que, para lograr el objetivo de mejorar los números de su equipo en la primera vuelta, “es fundamental ganar a los equipos que están por debajo nuestra”. Una condición “sine qua non” para mantener las aspiraciones a la zona noble de la Liga Asobal y lograr clasificaciones similares a las de temporadas anteriores. “No hay rival pequeño, se está demostrando en todos los partidos. La mentalidad debe ser la de una final si queremos remontar posiciones y estar arriba, así tenemos que hacerlo el sábado, porque para ellos, ganar a Cuenca es dejar pie y medio en Asobal”, añadía.
Con varios días de descanso, el técnico confiesa que sus jugadores han descansado, “sobre todo a nivel mental”. Pese a todo, las sensaciones del equipo durante la semana en los entrenamientos han sido buenas, “pero la prueba de fuego es el partidoPara Jiménez, la clave del partido estará en la defensa. Así, espera que su equipo no repita minutos de “desconexión” en el 6-0 y mantener una regularidad que permita a los suyos correr. Precisamente la fortaleza en este aspecto fue el factor decisivo en el encuentro de la primera vuelta en El Sargal, que terminó llevándose el Incarlopsa Cuenca por 30-24 en una segunda parte donde el cuadro conquense sólo encajó 8 goles.
