Si hay un estandarte que representa la entrega y el carácter aguerrido del Liberbank Cuenca es sin duda Pablo Vainstein, 'El Colo' firmó una nueva actuación discreta en cuanto a guarismos anotadores pero esencial en esas labores que no pueden medirse en la estadística propia, sino más bien en la rival al ver el número de lanzamientos o de pérdidas ocasionadas.
El argentino valoró el triunfo en Europa como algo personal, ya que en la campaña pasada, una rotura del talón de Aquiles le hizo perderse tanto los partidos contra el Bocholt, como la fase de grupos, y pese a las molestias que arrastraba, no hubo quien le quitara la idea de jugar de la cabeza: "En lo personal quería jugar, el año pasado me lo perdí, lo tuve que ver en la tribuna, sé lo que se siente, por eso cuando terminó el partido fui a saludar a Santi y Dutra, es importante que el equipo esté unido, y me gustaría meternos en fase de grupos porque quiero que ellos estén, es por eso que quería jugar y disfrutar de este ambiente, Lidio nos lo decía antes de salir a la cancha, jugamos para la ciudad, no sólo por nosotros, es algo muy lindo".
Ahora sí, Vainstein 'cató Europa' y con un trabajo inconmensurable: "Tomamos este partido como una final, sabíamos que era importante no sólo para el equipo, también para la ciudad, el estar por segundo año consecutivo en EHF, había que dar la car y demostrar que somos un equipo que puede luchar por grandes cosas", declaraba el jugador que etiquetó el choque ante el Alpla "como el mejor partido del año" a su parecer, si bien, no da la eliminatoria por cerrada, "se trata de demostrar que hay que saber jugar 120 minutos, tenemos que ir allá, sabiendo también que hay una escala importante como León y que será un lindo partido".
La defensa como marca de identidad pasó una vez más por el vocabulario de Pablo, que remarcó el ritmo y la intensidad vistos en el choque europeo como algo "primordial". "No nos relajamos, fue un lindo partido y nos vamos exhaustos", pero también dejaba claro que el resultado no podía hacer empequeñecer a un rival que ha llegado hasta esta Q3. "No puede decirse que ganamos fácil y ya, ellos son jugadores internacionales y han dejado equipos muy fuertes como el Skjern danés, hay que valorar lo que hicieron y que nosotros jugamos un buen partido, por lo que es necesario ir concentrados a la vuelta".
De igual modo, Vainstein aludía a la derrota ante el Sinfín como un toque de atención con premio, "de todo se aprende", señalaba el argentino que pide mantener "la consistencia defensiva más regularmente, ojalá la sigamos teniendo porque es muy importante, si defensivamente estamos así, es difícil que nos ganen".