El alpinista Pedro Cifuentes volverá un año más a la Patagonia argentina. Este apasionado de las alturas y la escalada intentará por tercera vez coronar la cadena montañosa del Fitz Roy en solitario, un reto mayúsculo que ya ha intentado hasta en dos ocasiones en enero de 2017 y 2018 sin éxito, debido a las inviables condiciones climatológicas.
El conquense partirá hasta el continente sudamericano el próximo 8 de enero. Mientras tanto continua con su preparación, a pesar de que él asegura estar “a tope” para poner toda la carne en el asador: “Para hacer una expedición como esta y encima en solitario, a parte de todo un año entrenando, llevar el mejor material y el mejor equipo, también es necesario que el tiempo acompañe”, declara.
Para que se hagan una idea y según explica Cifuentes, las condiciones ‘ideales’ para enfrentarse a esta concatenación de cumbres “varían de 0 a -10º C y vientos por debajo de los 40 kilómetros por hora”. Todo ello para un recorrido de unos 4.000 metros de escalada vertical que comenzarán con el porteo de todo el material hasta la base de la pared “con varios porteros de unos 40 kilos cada uno”, declara Pedro. Sólo esto le llevará un par de días hasta situarse en el punto de partida para empezar a conquistar una a una las distintas cumbres: Guillaumet, Marzmoz, Val Bios, Fitz Roy y Poincenot, entre otras. “Llevo comida para 40 días, si lo lograra en menos tiempo sería algo increíble”, afirma el escalador que asegura que “lo más complicado del recorrido son dos puntos de no retorno en los que, por muy malas que sean las condiciones, sólo puedes seguir hacia adelante”.
La aventura supone un desafío para el cuerpo y la mente, si bien, no es la primera de las expediciones en solitario que realiza este escalador. Cuando le preguntan por ello, Pedro admite que recibe “muchos calificativos, algunos cariñosos y otros no tanto” y que cuando lo comenta con otros amantes del montañismo, “se sorprenden por el simple hecho de que alguien se plantee esta expedición”.
Si lo consigue, este conquense será el primer hombre sobre el planeta en lograr esta proeza, pero Pedro no piensa en la aventura por el simple hecho de acabar: “No me gusta vender la piel del oso antes de cazarlo, lo hago porque me gusta la montaña y las expediciones fuertes, parece que sólo hay que celebrar cuando uno consigue algo, cuando en este mundo, el simple hecho de volver de una expedición como esta significa que ha conseguido mantenerte con vida, algo que en estas situaciones no es nada fácil”.
Así, sólo queda esperar el buen desenlace para este tercer intento de Pedro Cifuentes de coronar el Fitz Roy y si a la tercera, va la vencida.
