Antonio Taravilla López se jubila. Con él también una parte del fútbol de Cuenca y de Castilla-La Mancha. El pasado día 13 cumplía los 65 saños. De ellos, 30 como funcionario, trabajando en el Comité de Competición de la Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha, desde su creación en diciembre de 1985.
En la Balompédica jugó su padre Mariano, 47-48, y su tío Luis, en los 50. Él también lo hizo en cuatro temporadas a principio de los 70 (tuvo como entrenadores a Montes, Mielgo, Pintos y Ángel Domingo), tras haberlo hecho antes y después en el San José. Sacándose el curso de entrenador de Nivel I, con Caparrós y Arguisuelas entre otros compañeros y con Sendino entre otros profesores, conoció a Nieves Mercadillo, autor de la Federación Territorial de Fútbol y primer presidente.
“La Federación era un embrión, una incógnita, y Nieves nos pidió ayudarle una vez que consiguió convencer a todos de que la Federación estuviera en Cuenca. Desde el primer momento me decidí por el Comité de Competición porque es el que más cerca está del juego, de la competición. Eligió al abogado Rafael Matas y junto a Pepe Muñoz se confeccionó el Comité y ahí empezamos”, nos dice.
Como todos los inicios, tampoco este fue fácil. “Al principio nos basamos en los estatutos y el reglamento de Madrid, pero poco a poco empezamos a andar. Había que resolver, además de las tarjetas, temas tan complejos para nosotros como las alineaciones indebidas, incomparecencias, clausuras de campos, gravedad de los incidentes, circunstancias atenuantes y agravantes... Era un tema delicado y había que hilar muy fino porque éramos un comité que sancionaba y sancionar nunca es bueno”.
La Federación Territorial de Fútbol empezó en un despacho en el edificio de Falange y después en el piso en Sánchez Vera que había dejado Radio Nacional. “En uno de sus estudios nos reuníamos Competición”. En 1995 se inauguró el actual edificio. “Fue un logro increíble de Nieves Mercadillo. Toledo se había llevado la capitalidad y Albacete lo exigía porque era más futbolera, pero Nieves lo consiguió”.
La informatización fue un paso muy importante para Competición. “Fundamental en nuestro funcionamiento. Antes las tarjetas las llevábamos como las cuentas en los bancos hace 40 años, en libros y a mano. Igual que las clasificaciones. Teniendo en cuenta lo extensa que es nuestra región, las actas nos llegaban los miércoles o jueves. Hoy en día, cualquier acta la pone el árbitro al terminar el partido, aunque sea de Segunda Regional, y en la Federación en la misma semana actúa Competición, Apelación y el Comité de Disciplina Deportiva, lo que es vital para cualquier sanción importante, además de poder comunicarlo a los clubs de manera inmediata. Y estamos hablando de más de 400 actas por semana ya que también llevamos el deporte escolar”.
Antonio Taravilla lleva 25 años ejerciendo como delegado federativo con la Española hasta Segunda División B. “El Comité de Competición ha funcionado porque siempre hemos sido una familia. Y ahora funciona mejor porque ya no hay las agresiones a los árbitros, con daños en sus coches, que había en los 80. La formación de los entrenadores y la cultura en jugadores ha sido fundamental”.
De su trabajo en la Territorial, estos son los nombres que más le han marcado. “Los dos presidentes que la Federación ha tenido, Nieves Mercadillo y Antonio Escribano, y los dos presidentes de Competición, Rafael Matas y Javier Solera”. Llega el momento del adiós, pero no de la tristeza. “Lo que empezó siendo un hobby para mí ha terminado siendo mi trabajo. He acabado mi etapa laboral en el puesto de trabajo que más me gustaba y en el que he disfrutado. Más no puedo pedir”.
