La fiesta que ha sido hoy El Sargal no ha podido refrendarse con una victoria del Rebi Cuenca, que ha caído por 22-30 en su estreno en Copa EHF ante el Sävehof sueco. Se desconectaron los locales hasta que metieron una marcha más en la segunda mitad, pero los amarillos apagaron el incendio antes de que hubiese remontada alguna.
Empezaba adelantándose el Sävehof mediante Andersson, y sería Fede Pizarro quien igualaría rápidamente para abrir la veda del Rebi Cuenca en Europa. Los suecos llevarían la delantera en los primeros tanteos, igualados, en los que los conquenses no le perdían la cara al partido. Tramo bastante físico, con el equipo de Lidio Jiménez yendo bastante al contacto, lo que costaba alguna tempranera exclusión.
Además de mover muy bien la bola y encontrar fácilmente el gol en escasos pases, empezaría a funcionar el que sería el principal motivo de la ventaja sueca: Simon Möller, un auténtico muro en portería que denegaba el gol una y otra vez a los conquenses.
Empezaban a abrir brecha los suecos, que además se veían animados tras unas pérdidas infantiles en el equipo local. Rompía unos secos minutos Rubén Río con un cañonazo que animaba los ánimos, aunque el dominio seguía correspondiendo al equipo de Apelgren.
Seguiría siendo un quebradero de cabeza Möller, que le tapaba a Sergi Mach, a Simonet y a cualquiera que se le pusiese por delante. Con el 5-11 en el marcador, Lidio Jiménez solicitaba un tiempo muerto para frenar la sangría. Con más corazón que cabeza lo intentaba un Rebi Cuenca bastante seco, que fallaba el tiro final con un Teixeira que no había tenido su mejor primera mitad, con algunos fallos poco propios de un jugador de la calidad que ha mostrado otras veces. 8-14 reflejaba el luminoso de El Sargal con la sensación de que el partido se había puesto muy pero que muy cuesta arriba tanto por marcador como por sensaciones.
Pero no iba a amedrentarse el Rebi Cuenca, que mediante Pizarro y un buen Pozzer pivotando trataba de acercarse a los suecos. Se ponía a 4 tantos el Rebi Cuenca tras una contra machacada por Arnau Fernández, pero a continuación volvería a pegar un bajón la escuadra local: parcial de 0-3 culminado por Þorisson para dibujar un 13-20 muy poco halagüeño.
A pesar de ello, con todo lo intentaban los Encantados, que empezaban a encontrar algún hueco en la línea de 6 metros, sobre todo a través de un Diego Vera que estaba firmando buenos movimientos. Era ahora el Sävehof quien había pegado un bajón, y El Sargal lo sabía: estallaba en vítores tras el gol de Sergio López, la posterior parada de Espinha y, de nuevo, el tanto de un certero Diego Vera, que se abría paso como quería. A 3 goles -19 a 22- estaba el Rebi tras sus mejores minutos.
Sergi Mach la mandaba a la mismísima escuadra para que su equipo se mantuviese a la estela, aunque la mala noticia llegaba cuando Nacho Pizarro veía la roja tras una acción sobre Sandberg. Se volvía a romper el partido en estos minutos, ya que los rosados no estaban encontrando ahora hueco alguno y el recurso del portero jugador fue aprovechado por el Sävehof para aumentar su renta hasta los seis tantos. Se había acabado el sueño.
Se notaba que los ánimos habían decaído, y a los suecos tan solo les quedaba rematar la tarea con algún tanto más. Había ganado justamente un certero Sävehof, que finalmente dejaba el luminoso con un 22-30.
Entre aplausos se despedían los aficionados, valorando el esfuerzo de los suyos ante un complicado rival. El siguiente partido de Copa EHF tendrá lugar la semana que viene ante el Pfadi Winterthur, aunque antes deberán medirse a un siempre complicado Ademar León en Liga ASOBAL el viernes 20 a las 20:30 en El Sargal.
