El campeón de la XXXI Liga Sacyr Asobal visitará este sábado, a las 12:00 horas, El Sargal para enfrentarse a un Incarlopsa Cuenca que, tras un nuevo aplazamiento por casos de Covid-19 en su rival, volverá a jugar 15 días después.
Pese al contratiempo, este partido ante el todopoderoso Barça está visto por el técnico conquense Lidio Jiménez como “una oportunidad para volver a coger ritmo de competición, en especial para los jugadores que acaban de salir de una lesión”, en referencia al “Colo” Vainstein o Bulzamini. No estará Lucas Moscariello, que sigue renqueante de su hombro y que Jiménez reservará para la final del próximo miércoles en Logroño (20:00 horas).
El encuentro contra el Barcelona suele suponer ese “pasar por el dentista” obligatorio que, por otro lado sirve para que uno de los mejores equipos del continente ofrezca su balonmano en El Sargal. “Es un rival fuerte, el mejor equipo de Europa, tiene que ser un partido bonito para la ciudad. El hecho de que venga el Barcelona aquí es un recordatorio para darse cuenta dónde estamos y contra quién luchamos. Viene bien para el balonmano, para los aficionados y para la ciudad”. No obstante, el técnico del Incarlopsa no quiere que el paso del conjunto blaugrana sea un camino de rosas y su equipo plante guerra al titán culé.
Además, está el añadido del asunto de Leo Maciel. El portero argentino al que varios medios sitúan en el Barcelona, aunque su entrenador actual señala que “es una de las muchas opciones que tiene encima de la mesa”, no dejar de añadir una pizca de morbo al encuentro, mientras que para su técnico y una de las figuras de su fichaje desde el Balonmano Zamora supone “todo un orgullo”. “Ojalá que Leo vaya al Barça y siga en España para poder seguirlo cada fin de semana. Que Maciel pueda irse a un club así habla de su trabajo, del equipo y de lo importante que es para todos y para él”, argumentaba el técnico en la previa del choque destacando el papel de “descubridores de talentos” que ejerce el Incarlopsa: “Así es nuestro club, traemos jugadores de canteras emergentes para que hagan buenas temporadas y aprovecharnos de ello, la gente sabe dónde está Cuenca y cómo se juega en Cuenca”.
LOGROÑO
No obstante, Lidio ve en el partido del próximo miércoles ante Logroño la clave para seguir con opciones de alcanzar el objetivo europeo, por mínimas que sean. “Si no ganamos en Logroño, no vale de nada pensar en el resto de partidos. Vamos a jugar contra el Barcelona, vamos a hacer disfrutar a nuestra gente de un buen partido y a esperar seguir cumpliendo como lo hemos hecho en lo que llevamos de segunda vuelta”. Y es que el técnico no oculta el disgusto de esta temporada y lo adulterado de la campaña. “Es una mierda, ojalá venga agosto con nuevas perspectivas, seguridad, vacunas y afición”.
