Los rojillos se enfrentaban al último clasificado, el Mora C.F, en un campo en el que siempre es difícil ganar. La primera parte ha sido vertiginosa y llena de despistes por parte de ambos equipos que han servido para inaugurar los marcadores, primero por parte de los locales, tras un despiste defensivo, y después, igualando la contienda, con un balón a la espalda de la defensa. Con una segunda parte muy igualada, de nuevo los despistes han sido los encargados de inclinar la balanza hacia el Obrero.
El San José buscaba dominar el partido, como viene siendo habitual en su definicion de juego, y durante casi toda la primera parte lo consiguió, de hecho, se generaron ocasiones para haberse ido al descanso por delante del marcador. Para mayor comodidad de los rojillos, los locales plantearon un partido con la defensa adelantada, lo que provocaba que los de Fran García llegaran bien por banda a la segunda línea, generado ocasiones de peligro.
Un despiste de la defensa propició el gol del Mora que ponía el 1-0 en el marcador y evidenciaba algunos problemas en la puntería de los rojillos.
El Obrero, que había perdonado ya un par de ocasiones de gol, seguía con el dominio del esférico y progresando en las líneas defensivas locales, así, en un buen balón a la espalda de la defensa, Samu les gana en velocidad y define a la perfección ante el portero. Con la contienda igualada llegaron los peores minutos para los rojillos, que durante los últimos minutos de la primera parte sufrían encerrados en su campo, aunque bien es cierto que los toledanos no llegaron a generar ocasiones de peligro claro.
La segunda parte ha sido más igualada y menos entretenida, no se creaban ocasiones claras para ninguno de los dos equipos, salvo una jugada aislada de Raúl Verdejo, que está siendo clave ultimamente, y que el guardameta local paró con facilidad.
Se repite la jugada de la primera parte, otro balón a la espalda de la defensa del Mora, lo enganchaba Raúl Verdejo y culmina de manera precisa ante el guardameta toledano. Los rojillos se adelantaban en el marcador poniendo, el que a la postre, sería el resultado definitivo, 1-2.
Los jugadores del Obrero valoran este resultado como una victoria de mucho mérito y se vuelven a Cuenca muy contentos, comodos en la clasificación y con la mente ya puesta en la semana que viene, que jugaran, por primera vez en 2024, en casa.