Lo que parecía imposible hace unos meses ha sido posible para el San José Obrero: los rojillos han salvado la categoría en Preferente Autonómica tras una remontada en la que muy pocos creían. Encajados en el noveno puesto, los obreristas acaban de la mejor manera posible una temporada muy convulsa, con sus más y sus menos, que el técnico del equipo, David Angulo, analiza una vez han podido respirar tranquilos con la permanencia en el bolsillo.
Angulo no esconde que ha sido una temporada difícil llena de altibajos y distintas idas y venidas que han afectado al equipo. Han sido los “inicios” los que han lastrado al equipo, ya que se produce el curioso dato de que tanto al comienzo de la campaña como a la vuelta de Navidades, los rojillos tardaron en arrancar.
“No es muy buena ni sobresaliente, pero es buena porque hemos logrado la salvación como novenos y tenemos que celebrarlo”, asegura Angulo. No es para menos, ya que no era fácil creer en el objetivo después de tocar fondo en el derbi conquense ante la Balona, cuando cayeron por 0-1 en el Obispo Laplana: sus vecinos albinegros se ponían a tan solo un punto y los rojillos eran firmes candidatos al descenso, pero Angulo ve este día como un momento de inflexión en el que empezaron a firmar “números de playoff” para convertirse en uno de los equipos más en forma del grupo.
“A todos los equipos les tiemblan las canillas en esa situación, pero este equipo nunca se rinde ni baja los brazos. Ha sacado su mejor versión estas dos últimas temporadas haciendo dos machadas en las que se han salvado haciendo un buen fútbol”, resalta.
La plantilla experimentó un gran cambio tras la derrota ante la Balona, firmando tras ella números de playoffs
Tan delicada llegó a ser la situación en cierto punto de la temporada, desvela Angulo, que llega un momento en el que tanto él como su cuerpo técnico, para “no ser un estorbo”, ponen su cargo a disposición de la junta directiva en el caso de que esta encontrase otras opciones que pudiesen salvar la categoría.
La dirección confió en el míster y su equipo, y ahora Angulo celebra el haberles devuelto esa confianza con resultados. “Ha sido trabajo de todos: junta, jugadores, cuerpo técnico, afición… porque además se ha visto mucho ambiente este año en Las 500. Hemos ido todos de la mano para salvar esta situación y yo creo que es la salvación de todos”, manifiesta.
CERROJO EN DEFENSA
Una de las razones que puede llegar a explicar este cambio tan drástico es la reconfiguración de la defensa. El Obrero ha mostrado un gran nivel ofensivo durante toda la temporada y así lo demuestran los números: 59 tantos a favor en 34 partidos. No obstante, flaqueaban en defensa con 54 encajados, tan solo superados por cuatro equipos de la categoría.
“Ahí ha estado la clave: en los últimos 11 partidos hemos cerrado la portería. Hemos defendido todos juntos mucho mejor, porque antes estábamos divididos. Unos atacaban y otros defendían, pero nos hemos puesto el mono de trabajo y hemos defendido y atacado todos. Han demostrado ser un equipo”, valora Angulo, que recalca también las porterías a cero y los choques en los que tan solo han encajado un gol por acciones puntuales.
El técnico destaca además lo extraño de haber firmado buenos números ante equipos de la zona alta como Quintanar de la Orden, Villa o Alcázar mientras que no han conseguido ganar ante rivales directos como la Balona, Azuqueca o Yuncos.
El Obrero ha sido uno de los equipos más goleadores de la categoría con 59 tantos a favor en 34 partidos
FUTURO EN EL AIRE
De cara a la próxima temporada se presentan algunas incógnitas en lo que al cuerpo técnico y la plantilla se refiere. En cuanto a los jugadores, se prevé que los motivos laborales y estudiantiles alejen a varios efectivos del Obrero. “Es difícil mantener una base, quien esté el año que viene tendrá que hacer casi una plantilla nueva”, adelanta. Calcula que serían alrededor de siete u ocho jugadores de la plantilla actual los que se mantendrían de cara a la próxima temporada, por lo que cabe esperar un San José con muchas caras renovadas.
David Angulo no continuará como entrenador del club, por lo que la nueva junta directiva encabezada por Rafa Reyes tendrá a tarea de conformar el proyecto para la próxima temporada. De momento, lo que le toca al club es recargar pilas y disfrutar del buen sabor de boca que ha dejado este final de curso con la ilusión de firmar otro todavía mejor.