Peleándolo hasta el último segundo: así ha caído el Rebi BM Cuenca ante Bidasoa Irún (28-27) en Artaleku, una de las canchas más complicadas de la ASOBAL. Los de Lidio Jiménez han estado en el partido hasta el último momento, pero pequeños detalles, sobre todo las pérdidas al final, han acabado condenando a un Ciudad Encantada que se ha quedado con la miel en los labios.
Igualados primeros compases entre Bidasoa Irún y Rebi Cuenca que acabarían favoreciendo al combinado de Lidio Jiménez: especialmente inspirado se mostraba en estos minutos un Alex Pozzer con mucho acierto de cara a portería. Tocaba balón Tonicher también para ayudar al combinado conquense a abrir cierta distancia cuando Rudolph anotaba para firmar un 4-7 que obligaba a pedir el primer tiempo muerto en el banquillo local, pues no le gustaba a Mozas lo que se estaba viendo.
No se amilanó el Rebi Cuenca ante el reajuste irundarra, sino que aumentó su ventaja al poner Nacho Pizarro el 6-10 con un estético movimiento. Furundarena y García recortaron distancia para los locales, aunque los conquenses conseguían mantener un colchón de dos-tres goles. Se disipó cuando, con el 10-13, los de Lidio Jiménez encajaron un parcial de 0-3 mediante Asier Nieto y dos tantos de Pedro Pacheco, todo un quebradero de cabeza para el Rebi Cuenca.
Consumaría la remontada Bidasoa Irún con un brutal cañonazo por el centro de Pedro Pacheco y bien pudo ser aún más de no ser por una intervención de última hora de Pedro Tonicher. 15-14 era el resultado de la primera mitad.
No le perdía la cara al partido el Rebi Cuenca en la segunda parte, manteniéndose a la estela de un Bidasoa con una ligera ventaja. Buenos minutos tanto de Leo Maciel, ex del Ciudad Encantada, así como del propio Tonicher, que iba a demostrar en este partido que el equipo es capaz de grandes cosas cuando el meta está a su nivel.
Lograba empatar el Rebi Cuenca a 20 tras los tantos de Pozzer y Sergio López, aunque la puntilla la ponía Hackbarth con un 20-21 que, de nuevo, obligaba a Mozas a parar el partido. Mejor los conquenses en estos minutos, espoleados por esas paradas de Tonicher y la buena lectura ante la defensa irundarra, que estaba sufriendo.
A falta de cinco minutos, todo estaba por decidir con el 25-25, y la igualdad se mantendría hasta los últimos segundos. Una pérdida de Asier Nieto con el 27-26 y la consiguiente contra acabó en otra pérdida de Tchitombi en lo que podría haber sido el empate. Tras un tiempo muerto, Pacheco echó por tierra el plan conquense con el 28-26, y aunque Fede recortó distancias en apenas unos segundos, la derrota era invevitable.
28-27 y los dos puntos se quedan en Irún para desgracia de un Rebi Cuenca que se vuelve de vacío. La semana que viene, los conquenses se medirán a Anaitasuna en El Sargal, esperando retornar a la senda de la victoria tras dos derrotas consecutivas.
