San Marcos no ha cedido ante el filial del Queso Mecánico. El arreón final de los verdiblancos dictó sentencia en su feudo, donde tan solo han sufrido una derrota esta temporada. El partido, que se les puso de cara desde un principio, fue remontado por el Atlético Albacete, que cedió ante la insistencia quintanareña en los últimos minutos.
Empezaría golpeando en primer lugar el Quintanar del Rey en los primeros minutos con el gol de Cifuentes en el 8, que recibía un pase de Fran Minaya desde la banda derecha y que no fallaba en la definición. Le daba así mucha tranquilidad a un equipo al que no se le suelen escapar los partidos en este tipo de situaciones.
En la segunda mitad saldría mucho mejor el filial del Albacete Balompié, dándole la vuelta al partido en tan solo un cuarto de hora: Pablo Jiménez pondría las tablas en el 50 tras recibir un centro raso desde la derecha y abrirse paso para definir con un tiro cruzado, uniéndose su compañero Carlos Jiménez a la lista de goleadores cuando adelantaba a los blancos en el 64. Nada más y nada menos que de chilena anotaba el albacetista tras recibir un bombeado y tranquilo balón de Pablo Jiménez. Muy solo en el remate que ponía el 1-2.
Pero el Quintanar quería seguir haciéndose fuerte en su campo y lo intentaba con insistencia. Por tanto, llegaría la recompensa en esos últimos minutos en los que las piernas flaquean y todo está por decidir. Cava ponía la igualada en el 81 con un rocambolesco gol a la salida de un córner, y en el 89, con el tiempo de descuento casi llegado, el centrocampista Toni –exjugador, precisamente, del Atlético Albacete- certificaba la remontada con el 3-2. Fue tras una dejada de Megías con la cabeza a la frontal la empaló perfectamente con un trallazo ante el que nada podía hacer el meta.
Tres goles para tres puntos que mantienen a los quintanareños en la pugna por esa primera posición que tan poco cede el CD Guadalajara. La semana que viene, los conquenses afrontarán una complicadísima jornada ante el Villarrubia.