En el momento de la verdad el cuadro Quintanareño afrontó su cita especial, la sexta oportunidad en su historia de lograr el ascenso desde la Tercera División, tras más de 50 días trabajando específicamente para esta fase. Carlos Gómez sacó su once de gala para la ocasión ante un Guadalajara que tenía las mismas intenciones de alzarse con la victoria, con la diferencia que las tablas en el marcador beneficiaban a los quintanareños por su posición a la conclusión prematura de la competición.
Se esperaba un partido con intensidad y lleno de pequeñas batallas sobre el césped del Manuel Delgado Meco y no defraudaron tales quinielas. Faltas, multitud de disputas por el esférico y tensión en cada bruce a sabiendas de lo que había en juego, un puesto en la final de la fase de ascenso en la que ya esperaba la UD Socuéllamos, que se deshizo el día anterior del CD Toledo.
Una vez comenzó a rodar el balón, se pudieron ver las premisas claras de cada escuadra. Quintanar esperaba al acecho para hacer daño con la verticalidad de Kain, Fran Moreno o Mazzochi, como punta de ataque. Pero cuando el Guadalajara comenzó a revoletear cada vez más el campo de los verdiblancos, llegó el tanto de los conquenses al golpeo de Fran Moreno desde el lateral del área con la fortuna de que el balón tocó en la barrera y acabó en el interior de la portería de Manolo.
La alegría duró poco. Apenas cinco minutos de adelantarse los de Quintanar, Fran Santano igualó el marcador con un gran disparo desde la frontal del área imposible para Ferri y puso las tablas de nuevo en el campo justo antes de la pausa para la hidratación entre ambos equipos.
A medida que se acercaba el descanso volvían los acercamientos de ambos equipos y continuaban las interrupciones por las faltas en un partido de alta exigencia para el colegiado. Así, cuando se entró en el tiempo de descuento, una triangulación de los alcarreños provocó una perfecta rotura de líneas a la defensa del Quintanar con Fran Santano desbordando por banda y buscando con una asistencia medida al corazón del área que remató a la perfección Campoy para darle la vuelta al marcador y poner al Guadalajara por delante justo antes de llegar al parón intermedio.
Nada más comenzar el segundo tiempo, Carlos Gómez dio entrada a la artillería pesada con Álvaro Collado y Madalin, ambos futbolistas que pudieron jugar gracias al levantamiento de sus sanciones leves por el TAD. No se hizo esperar la reacción y se vio un Quintanar más ofensivo, algo que mantuvo a un Guadalajara muy pendiente para hacer daño al contraataque en jugadas inacabadas por el ataque quintanareño.
Pero el ímpetu por buscar un gol que sirviera para igualar el marcador y favorecer a los intereses del Quintanar del Rey se fue apagando ante un Guadalajara muy bien pertrechado que atascaba cualquier posible sucesión de pases para los manchegos en campo contrario.
Con poco fútbol y muchas interrupciones y una ausencia total de jugadas trenzadas u ocasiones de gol, Carlos Gómez agotó sus cambios con la entrada de Josemi, Roque Saiz y Amalio, pasando a disputar los últimos diez minutos de partido con sólo tres hombres en línea defensiva.
En un pequeño despiste de la zaga alcarreña, Amalio tuvo la ocasión más clara hasta el momento en el segundo tiempo, pero el atacante del Quintanar no consiguió empalar de forma efectiva el esférico.
Las intenciones de los quintanareños se vieron en cada hueco que ganaban con la abrupta defensa del Depor que cortaba cada atisbo de desmarque con una falta táctica. En respuesta, el Quintanar buscaba el balón al corazón del área, pero Mansour se mostró gigantesco repeliendo cualquier esférico que se acercaba por la vía aérea.
En este vuelco ofensivo, Fran Santano pudo rematar el choque a la contra pero su disparo se fue pegado al poste de la portería de Ferri. En la jugada siguiente y tras varios rebotes, Alcáñiz tuvo el pase en sus botas con un remate en el área pequeña que se fue por alto cuando ya podía cantarse el empate.
Así se entró en el descuento con seis minutos de añadido. Guadalajara mareó la bola mientras los jugadores del Quintanar corrían con el último aliento para recuperar balones y mandarlos directos al área rival. Mientras que los de Acciari perdonaron nuevamente a la contra cuando llegaron a atacar con tres jugadores contra sólo un defensa y el portero del Quintanar.
En un desborde de Kain por la frontal, el quintanareño fue derribado cuando el tiempo de descuento llegaba a su fin. Era la última oportunidad. Un libre directo delante de la media luna y el Guadalajara con barrera de cinco jugadores e Iván Moreno tumbado en el suelo para evitar que el balón pasara por debajo. Mazzochí fue el elegido para ejecutar la acción y la pegó abajo a su derecha sin encontrar puerta y mandando el balón por línea de fondo. De esta forma, Moreno Osuna indicó el final del encuentro y el Quintanar del Rey quedó apeado de la final por el ascenso ante un Guadalajara que remontó con dos latigazos de calidad de Santano, sin duda el más destacado del encuentro, y Campoy el tanto de Fran Moreno.
De esta cruel forma, el CD Quintanar del Rey echa el cierre a una ilusionante temporada en la que volvió a acceder a los puestos de promoción de ascenso cinco años después, en una temporada atípica y marcada por la conclusión prematura de la competición por la pandemia y unos playoff exprés como medida de urgencia. Destacable la labor de Carlos Gómez al frente del su plantilla que tendrá que volver a intentarlo la próxima temporada.
