Los partidos del VivoCuenca, especialmente en El Sargal, no están dejando indiferentes a nadie esta temporada. El que les ha enfrentado al Socuéllamos este sábado no ha sido una excepción, y es que los azulones han conseguido vencer por 3 a 2 tras un frenético guion con remontada incluida.
Con una clara actitud ofensiva partía el FS VivoCuenca desde el inicio del encuentro. Con una presión alta, los de Manolo Moya asfixiaban a un Socuéllamos que no encontraba la manera de salir. Dispondría de varias ocasiones el cuadro conquense, las cuales eran desbaratadas por el meta visitante José Manuel Carcelén.
A pesar de la insistencia azulona, el primer gol cayó de lado socuellamino con un tiro fuera del área que sorprendió a los locales. No se vino abajo el equipo vivero, que puso todavía más empeño en buscar la portería contraria: consiguió hacerlo momentos después con una buena jugada por la banda que continuaba con un centro al medio aprovechado por Valen tras un rebote.
No obstante, la alegría no duró mucho: dispuso de una falta en buena posición el FS Socuéllamos y la aprovechó perfectamente. Los últimos minutos de la primera mitad fueron un auténtico asedio por parte de los locales: Ivi casi sorprendía al meta visitante con un saque de córner directo al primer palo. Mejor la tendría minutos después, con una jugada con rebote de por medio que, inexplicablemente, no acababa en gol. Había merecido empatar el cuadro azulón, pero perdonó en varias ocasiones y se marchó abajo al descanso ante un Socuéllamos que sí supo rentabilizar sus llegadas (1-2).
Tras el paso por vestuarios hubo un cambio en la portería visitante a pesar del buen rendimiento de Carcelén en la primera mitad. Avisó el Socuéllamos con un testarazo de Alonso Salmerón a centro de Daniel Lerín mientras que el VivoCuenca crecía poco a poco. Le costó arrancar tras el paso por vestuarios, pero llegado el 25 dispuso de varias ocasiones para adelantarse.
Triple ocasión para Budia: se topó en las dos primeras con Carlos Lerín, quien no se quedaba atrás en su actuación con respecto a la de su compañero. En tercera instancia, el conquense mandó un balón al palo, prácticamente a la escuadra.
Momentos después la tenía José Ángel Saiz, con un tiro que se le escapaba a Lerín de las manos y que, de nuevo, se iba al palo. Situación surrealista para un VivoCuenca que no lograba anotar.
Minuto 33 y el asedio azulón continuaba: Tomás Ávila, bajo palos, sacaba un balón enviado por Valen que era gol prácticamente cantado. El partido se había calentado previamente por momentos debido a algunas faltas y acciones arbitrales que no contentaron a los locales.
5 minutos para el final y Mario Gómez salvaba un mano a mano ante Álvaro Ruiz y poco después despejaba un potente tiro del capitán, Dani Lerín. A falta de cuatro minutos, el Vivo daba la sorpresa: Ivi, pegado a la banda izquierda, ponía un balón cruzado a la olla que Moha tocaba lo justo para confundir a la defensa y a Lerín, dibujando el 2-2 en el marcador.
Instantes muy tensos en los que el VivoCuenca echaba el resto… y encontró la recompensa. Valen le puso un buen balón a José Ángel, quien, en boca de gol, desataba la locura con el 3-2 a falta de 2 minutos. Aguantó con todo el equipo conquense, que defendió esa ventaja –ante un Socuéllamos ya con portero jugador- con uñas y dientes para dejar los tres puntos en casa.
Otro emocionante partido y otra emocionante victoria en El Sargal que permite a los azulones seguir soñando con el ascenso directo. Se encuentran a tres puntos del primer puesto, a expensas de lo que haga el Talavera mañana en su partido ante el Balazote.