Hay quien podría decir que le vio en La Fuensanta hasta en tres sitios distintos al mismo tiempo. Bajando a defender, robando balones, asistiendo, encarando a portería… el conquense Pablo Olivares se convirtió en un ‘pulpo’ para ayudar a que la UB Conquense venciese por 3-0 al CD Tarancón y certificase el ascenso a 2ª RFEF. Todavía recuperando el aliento, ofrecía algunas impresiones a este medio.
Extiende la enhorabuena por lo conseguido a toda la ciudad, y es que confiesa que “he visto La Fuensanta como nunca”, acordándose así de aficionados, cuerpo técnico y prensa, añadiendo también que “queda celebrarlo esta noche”.
Con respecto a su partido, comenta humildemente que intenta siempre aportar su granito de arena, aunque en choques tan señalados como este, siempre hay un plus de motivación. “Es de los que gusta jugar a todo tipo de jugador. Con la grada empujando, las piernas te van solas”, cuenta entre risas.
Originario de Villar de Olalla, declara también que, “para un chaval que se ha criado como yo, en las escuelas”, es un gran honor llegar al equipo y ascender en su primer año. “Ascender con el equipo de tu ciudad no se puede describir con palabras”, relata el joven, que se acuerda también del enorme recibimiento previo a la entrada al estadio y el vídeo de los familiares que han visto antes del partido. Así habla el centrocampista que ha dominado la medular blanquinegra durante una temporada para enmarcar.