Mejor el San José Obrero en el primer tiempo, con varias ocasiones para adelantarse. No lograron aprovecharlas y el 0-0 comandaba al descanso, yéndose los rojillos a vestuarios sabiendo que podían haber conseguido algo más.
El segundo tiempo se disputó en términos de más igualdad, aunque no hubo ocasiones de peligro real por parte de ninguno de los dos equipos. Tuvo fortuna el Torpedo, que logró anotar en su único tiro del encuentro mediante Israel Villasevil.
Se volcó el combinado de Olivares, encontrando la recompensa en el descuento: una falta en el centro del campo fue rematada en el segundo palo y acabó dentro de su propia portería tras el involuntario contacto de Álvaro Jiménez.
Al final, 1-1 y reparto de puntos con algo de fortuna para los rojillos, que si bien lamentaron esas ocasiones falladas, tuvieron esa pizca de suerte en el 90. 41 puntos acumulan los de Las 500, siete por encima de la promoción de descenso. Todo parece indicar que cerrarán la temporada sin sobresaltos, y para ello deberán sobreponerse al Santa Cruz la semana que viene en casa.