La 'nueva normalidad' se deja entrever en muchas facetas de la vida cotidiana, dando en muchas ocasiones un giro obligatorio de 180 grados a lo que antes era lo más normal del mundo. La pandemia ha afectado de lleno a nuestra sociedad y amenaza con hacerlo de nuevo bajo un confinamiento ante la subida de registros de infectados en el país.
Mientras tanto, en el resto de ámbitos, las actividades se desarrollan marcadas por los protocolos, los permisos, el hidrogel, los test y la seguridad ante todo. Es el caso del Incarlopsa Cuenca, que después de llevar entrenando tres semanas, este lunes ha abierto por fin sus puertas a los medios de comunicación para que podamos dar cuenta de la preparación del equipo conquense de la Liga Sacyr Asobal.
En un Sargal con el acceso bajo llave y mediante lista de entrada, como si de un club VIP se tratase, jugadores, cuerpo técnico, resto de personal y ahora también los medios de comunicación que vaya a utilizar o estar presentes en la instalación están controlados. El templo conquense del balonmano se encuentra cercado por zonas con cintas, flechas de un sentido y otro de circulación y dispensadores de hidrogel en puntos estratégicos.
Mientras tanto, en la cancha, las sesiones no distan demasiado de lo que sería una pretemporada normal, salvo por las mascarillas de los preparadores cuando no están interviniendo en la práctica, así como las botellas de agua marcadas para que cada jugador y miembro del cuerpo técnico tenga la suya, al igual que toallas y materiales similar.
Lidio Jiménez cuenta desde estas semanas con la totalidad de su plantilla con excepción de Fede Pizarro, que está previsto que llegue a Cuenca a finales de esta semana, y Lucas Moscariello, que se recupera de la operación de su dedo. También y como es habitual ha dado espacio a los canteranos como Armando Arce, Alvaro Martín, Jaime Colmena y los guardametas Paco Cano y Marcos Herraiz.
Así, en esta 'nueva normalidad' el Incarlopsa Cuenca continúa su preparación de cara a una temporada cargada de incertidumbre, con la única premisa clara de que este miércoles recibirá al Quabit Guadalajara en un encuentro sin público en El Sargal (a partir de las 20:00 horas) y con un debut liguero que, tras la última circular del Comité Nacional de Competición, parece ser que será contra el Dicsa Modular Club Cisne Balonmano, pero que paralelamente no se sabe si podrá disputarse en Galicia, dado que la Xunta ha paralizado las actividades deportivas.
