Con mapa y brújula en mano, una de las jóvenes promesas de la orientación conquense está en su gran momento. Se trata de Alba Muñoz del Campo, quien, de la mano de la Selección Española, ha vivido dos participaciones internacionales en el último mes. Refleja así su crecimiento durante estos últimos años e invita a continuar creyendo en la joven, que sigue y sigue acumulando participaciones en base a sus buenos resultados.
En su última aventura, Alba viajó hasta Smiltene –Letonia– para el Mundial Sub-23. A pesar de que su categoría –junior– correspondería a la Sub 20, sus buenos resultados le han valido el competir unas categorías por encima. Ha cosechado un decimocuarto puesto en sprint y un decimosexto en distancia larga, la cual implicaba 40 kilómetros. “Cuando llegas al final estás cansada física y mentalmente. Estuve casi tres horas porque el 80% de la carrera la hice bien pero luego tuve un fallo de concentración que me hizo perder el tiempo”, lamenta la joven, que por otra parte valora muy positivamente su paso por este Mundial en el que competía contra rivales más experimentadas.
En esta modalidad se encentra como pez en el agua, ya que asegura que le gusta el sprint urbano. “Tienes que ir más concentrado y un pequeño fallo te deja fuera, pero la clave es anticipar y no llegar a la baliza pensando dónde tienes que ir después”, aclara Alba.
Alba Muñoz cuenta en su palmarés con varios campeonatos de España, lo que le ha valido estar en Mundiales y Europeos
Pasa por un verano lleno de competiciones la joven orientadora, que hace un mes estuvo en Polonia para el Europeo de MTB-Orientación, donde corrió cuatro carreras en categoría sub 20, dado que las distancias en bosque no eran tan elevadas. Quinto puesto en relevos –lo que le otorgó un diploma– y decimocuarta en sprint, dejándole con muy buenas sensaciones.
SOÑANDO CON EL TOP 10
Todavía le queda una próxima gran aventura, del 9 al 15 de septiembre en Bulgaria, donde competirá en el Mundial Sub 20. Tendrá más posibilidades al competir contra rivales más parejas a ella en nivel y edad, además de que señala que este verano dispone de mucho tiempo para entrenar. “Espero poder conseguir algún top 10, porque son cinco carreras y creo que en alguna puedo lograrlo”, traslada.
No obstante, es consciente de las muchas diferencias que existen entre competir en España y fuera. “La primera vez que salí, para el Europeo Sub 21, vi que había mucho nivel y que estar en el Top 3 de España no significa que fuera vayas a estarlo. Los bosques de España son diferentes a los europeos y tienen ventaja porque están más acostumbrados”, explica.
Iniciada en el deporte a través de sus padres, señala que a día de hoy la orientación forma ya parte de su vida. “Me ha enseñado que no puedes rendirte a la primera, es importante rehacerse y continuar con lo que estás haciendo. No puedes decaer, sino concentrarte en no volver a fallar”, traslada la joven, que a día de hoy cuenta con distintas medallas a nivel nacional, destacando un 2022 en el que acabó como tricampeona o el propio 2024, donde ha sumado dos medallas de plata.
Afortunadamente, Alba explica que en Cuenca dispone de varios tipos de terrenos para entrenar, y es que se encuentra en un sitio idóneo para este deporte. “Tenemos mucha variedad: dependiendo de la competición, si vamos a un sitio con desnivel, arena, piedras… podemos adaptarnos a lo que viene de cara”, cuenta la orientadora, que empezó por sus padres y que añade que es un deporte “muy de familia”.
