El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, ha asistido esta mañana al homenaje que el mundo del fútbol ha rendido a Alfredo Hortelano y que ha consistido en el descubrimiento de una placa, obra del ceramista Rubén Navarro, en la entrada principal del estadio de la Fuensanta.
Nacido en Cuenca, Alfredo Hortelano falleció en 1984, con tanto sólo 27 años, siendo jugador de la Unión Balompédica Conquense. Anteriormente había jugado en el San José Obrero.
Este homenaje parte de sus compañeros de equipo de las temporadas 1987-1984, como el técnico Joaquín Caparrós, Antonio Taravilla y Florián Belinchón, entre otros, quienes han recordado a Alfredo Hortelano en presencia de su hija Marta, que lamentablemente no llegó a conocerle.
A este sencillo pero emotivo reconocimiento han asistido, además del alcalde, el concejal de Deportes, Vicente Martínez; el delegado provincial de Hacienda, Ramón Pérez Tornero; el diputado provincial de Deportes, Santiago Gómez, familiares y amigos de Hortelano y aficionados balompédicos.