El pasado Campeonato de España de Sprint dejó una alegría más para el piragüismo conquense de la mano del canoísta Samuel Alcalde. Este deportista sub-23 logró subirse al podio nacional en la modalidad de embarcación por equipos C-4 con el Piragüismo Aranjuez y conseguir una medalla que tiene toda una historia de superación detrás.
Samuel llevaba prácticamente toda su juventud practicando y compitiendo con el Piragüismo Cuenca. En su etapa junior fue donde este conquense logró alcanzar sus mejores resultados, clasificándose incluso para una competición continental y una medalla a nivel nacional.
No obstante, con el tiempo y los entrenamientos en solitario mermaron su ambición competitiva hasta el punto de dejar la disciplina. "Me encontré totalmente desmotivado y estuve un año prácticamente sin coger la canoa. Entrenaba en gimnasio y demás, pero creía que era el punto y final para mí en el piragüismo".
Una llamada y los contactos con viejos amigos y rivales de las competiciones hicieron rebrotar en Alcalde una oportunidad de volver a remar. "Desde Aranjuez me contactaron unos amigos y me animaron a hacer un control para formar parte del equipo. Estuve preparándome todo lo que pude durante algo más de un mes, viajé allí y conseguí ganar en la prueba de 200 metros. Después entré a formar parte del equipo de C4 y comencé a viajar una o dos veces por semana a Aranjuez para prepararme este Campeonato de España", explica Samuel.
Entre tanto, practicaba casi todos los días en las aguas del Júcar o el pantano de La Toba, mientras que los días que viajaba hasta la localidad madrileña realizaba entrenamientos intensivos de mañana y tarde con el equipo. "Eran muy exigentes, pero iba con mucho gusto. Hay dos entrenadores, uno especializado en canoas, y el grupo de entrenamiento es una maravilla. Compartes muchos conocimientos, técnicas e incluso lo que más me sorprendió fue el análisis de esos entrenamientos. Se ponían con una moto de agua a tu lado marcándote el ritmo de las paladas".
Una preparación intensiva que tuvo sus frutos de manera espectacular. Tras llegar al nacional, a Samuel le tocó estar en la última posición del barco junto a tres palistas de renombre como Alberto Pedrero, Javier Lobillo y Jorge Vélez. "Es una gran responsabilidad porque eres el encargado de llevar la dirección, me adapté como pude y salió muy bien", afirma. Así, el conjunto madrileño en el que compite este conquense consiguió subirse al podio en el C4 de 200 metros y quedarse a las puertas del cajón en la modalidad de 500 metros, en la que Samuel compitió con la segunda embarcación del Aranjuez.
"Esto me ha servido para recuperar la ilusión por remar y tomármelo de manera más madura, disfrutando más de la competición. Ha sido una experiencia brutal, tanto la preparación como competir", explica el atleta que ha afrontado un intervalo exigente tanto en lo físico, mental y lo económico, pues tanto para participar con el Aranjuez como para practicar en Cuenca, debe desembolsar las cuotas de socio de ambas entidades. Un esfuerzo que está dispuesto a seguir adelante para la próxima temporada, en la que desde el club madrileño esperan seguir contando con él: "Me lo hicieron saber y cuando hablé con el presidente me dijo que cuentan conmigo para la siguiente temporada viendo cómo he rendido pese a estar entrenando en Cuenca. Saben que puedo funcionar y hasta mi entrenador me felicitó por un estreno 'por la puerta grande' en competición".
De esta forma, Samuel Alcalde espera seguir creciendo de cara al próximo año en el que dará el salto desde la categoría sub-23 hasta la absoluta, entrenando en uno de los mejores conjuntos del piragüismo nacional.