Tras un pequeño periodo de duda en el que la continuidad de los Plaza en el Dakar 2023 ha estado en duda, Manolo y Mónica retomarán su rumbo en el rally más duro del mundo. El equipo Nebrija-Sodicars testó ayer el coche durante 600 kilómetros hasta Riyadh, donde la prueba ha partido.
Los Plaza están "emocionados y ansiosos" por poder volver a la competición para la que han estado preparándose todo el año. "Tenemos que dar las gracias al equipo de mecánicos de Sodicars que se han empleado a fondo para revisar todo el coche y cambiar aquellas piezas que podían estar generando los problemas técnicos", transmite el equipo.
Entre ellas destacan las transmisiones, una de las cuales se ha roto reiteradamente. Las piezas de nueva generación se han sustituido por los modelos antiguos, que parecen estar respondiendo bien. Los problemas mecánicos han roto el buen ritmo de carrera desarrollado por los Plaza y les han hecho llegar reiteradamente al campamento una vez caída la noche.
Durante la jornada de ayer el vehículo respondió bien a la ruta, y los Plaza esperan que hoy tenga el mismo comportamiento. "En un rally siempre hay complicaciones. Lo importante es superarlas y seguir adelante", aseguran padre e hija, que por otra parte afirman ser conscientes de que este Dakar está siendo especialmente duro, por lo que prestan especial atención a la navegación y conducción.
Por otra parte, Manolo y Mónica han deseado una pronta recuperación a Edouard Boulanger, copiloto de Peterhansel, que ha sido evacuado en helicóptero tras caer en un hoyo su vehículo.