Tarde negada de cara al gol para el Conquense, que tuvo sus opciones pero que acabó pagando, como en otros tantos partidos, la falta de efectividad. Coincide así Manolo Martínez, técnico blanquinegro, que asegura que los suyos las tuvieron para, al menos, no irse de vacío.
Sincero, el técnico de la Balompédica ha reconocido que se trata de una derrota dura. Indica que iba a ser un campo difícil, pues las limitaciones de las dimensiones favorecían unas segundas jugadas que buscaban constantemente con balones largos. Así lo analiza Martínez, que señala que han llevado la iniciativa del partido como si estuviesen “jugando en casa”.
Lamenta así los fallos en las jugadas ensayadas, como ese buen disparo de Manzano que por muy poco no encontraba la portería. Señala también las ocasiones de Gabri, la más clara según él, así como esa lejana volea de Héctor. Acciones puntuales que deciden el partido y que, en esta ocasión, les salía rana a los blanquinegros.
“Aunque haya sido un partido gris, que para el espectador no llamaba nada, el trabajo ha estado ahí”, sentencia el entrenador, que recalca que los suyos han hecho méritos para empatar.