El Balonmano Incarlopsa Cuenca ha cerrado la fatídica campaña 2020/21 con una 6ª posición de mucho mérito si uno hace balance de todo a lo que ha tenido que hacer frente este club. Lidio Jiménez cumplió su séptima temporada como primer entrenador, “la más difícil”, según apunta él mismo debido a la guerra que ha tenido que llevar dentro y fuera de la cancha para seguir cumpliendo con un objetivo: competir al máximo. Tras la bajada de telón de esta temporada, Jiménez analiza la actuación en liga al tiempo que mira con “mucha ilusión y ganas” al próximo curso con la esperanza de recuperar la normalidad pre-pandemia.
- ¿Cómo valoras la temporada?
Pues estoy muy contento por terminar y por hacerlo con esa 6ª posición. No es una temporada excepcional, pero llevamos muchos años siempre estando ahí, y a pesar de la cantidad de problemas, de incertidumbre, jugadores que se iban, que tenías que traer, lesiones... el equipo ha mantenido su estatus.
- No es fácil estar arriba cuando con un mes de competición te quitan a tu máximo goleador y tu portero titular se lesiona para varios meses.
Viene de mucho antes. En marzo teníamos un equipazo. Imagina con lo que hemos acabado con Marrochi, un tío que juega ataque y defensa, y Dutra. Pero en junio perdemos a Pablo (Marrochi), luego Dutra. Fede llega tarde y tiene problemas con las lesiones. Simonet, que es el único central que teníamos, es irregular. Tampoco tienes a Moscariello los primeros partidos y, para rematar, el equipo se contagia de Covid. Por eso creo que ha sido la temporada más dura, porque a pesar de eso, este equipo resurge y logra 25 puntos en la segunda vuelta, pero sí creo que teníamos más capacidad incluso.
- Y sin ese “octavo jugador”. Un Sargal en el que a más de uno le temblaban la piernas.
Jugar sin público ha sido un despropósito. Es algo muy importante para nosotros y se nos han escapado puntos por no tener ahí a nuestra gente. Porque los partidos a puerta cerrada perjudican mucho más a los equipos que están acostumbrados a tener 2.000 personas animándolos. En Cuenca el público es el empuje. Partidos donde te faltaba un jugador por lesión, la grada te daba ese aliento, ese último esfuerzo y el último partido contra Bidasoa es el reflejo. Vas detrás en el marcador, pero cuando tienes a tu gente a tu favor, puedes con todo.
- Se habla mucho del desgaste físico por el tema del Covid, los parones, ¿pero cómo ha sido mentalmente sobrellevar todo esto?
Muy duro. Ten en cuenta que tenemos muchos jugadores lejos de su casa. Mentalmente estábamos muy cansados. Lo que parecen pequeños problemas que no se les da importancia, pero hacen que el rendimiento no sea el que creemos que podemos dar.
- Quizás partidos como el de Granollers aquí o el de Logroño fue donde más se vio, porque nos hemos acostumbrado a que este equipo nunca baje los brazos.
Cuando hemos estado todos en sintonía, el rendimiento ha sido espectacular. Estuvimos bien hasta el partido de Nava. Luego volvió a venir un nuevo parón y lo de Logroño fue horrible, y eso nos costó esas derrotas. Pero aun así, el equipo supo reaccionar porque sabía que tenía que terminar bien la temporada, de ahí que se volviera a ver esa mentalidad ganadora contra Bidasoa y que también se vio en victorias como Huesca o Anaitasuna.
- Anunciaste en SER Deportivos Cuenca tu renovación por dos años, ¿Se te pasó por la cabeza el irte al no poder retener jugadores importantes?
No. Siempre me he sentido parte del proyecto. Además, conforme iba sabiendo que había jugadores que se iban, yo ya hablé con el presidente y la directiva para plantear el futuro proyecto con jugadores jóvenes, que tuviera un buen escaparate y poder así mantener a gente como Thiago, Simonet o Pizarro. Nunca pensé que podría irme porque hay jugadores que se quedan y que necesitan de la confianza pese a que haya habido otros que se han ido. Continúo porque hay una base muy importante y nos hemos reforzado con jugadores jóvenes que nos pueden dar una mezcla muy positiva.
- Savia nueva pero, ¿seguirá el estilo de siempre?
Vamos a intentar que nuestra seña de identidad siga pese a que no le puedo pedir a un chaval que me defienda como “Colo”. Hay que adaptarlo a los jugadores que vengan, trabajar cosas y entrenamiento, entrenamiento y más entrenamiento. Será diferente a otros años, pero lo mantendremos porque creo que el 80% del éxito de un equipo es su defensa y la portería.
- ¿En qué tendría que mejorar el equipo para seguir creciendo?
Hay que tener esa estabilidad. No puedes tener cada semana gente llamándote o preguntando por tus jugadores. Es cierto que se bajó el sueldo a los jugadores, pero hay que aclarar que estamos a primeros de junio y se ha pagado prácticamente todo, algo que muy pocos pueden decir. Hay que mejorar a nivel organizativo, deportivo e intentar profesionalizar el club todo lo que se pueda. Además, el proyecto del nuevo pabellón es un incentivo para que la gente, empresas y administraciones se sigan volcando con un club de balonmano que es referencia en su región.
- ¿Qué planes tienes para la futura pretemporada?
Sobre todo, jugar, si nos dejan. Espero que ya estemos todos vacunados y meteré más partidos que ningún año. Será una pretemporada dura, pero quiero que el equipo juegue y sea competitivo.
