
El Rebi BM Cuenca ha logrado pasar a la tercera ronda de la Copa del Rey al apear al UBU San Pablo Burgos por un ajustado 29-30. Lidio Jiménez, entrenador del equipo conquense, ha valorado lo ocurrido en El Plantío tras un duro choque.
“Partido típico de Copa, sabíamos que íbamos a sufrir y que iba a costar muchísimo sacarlo”, transmite el conquense, señalando que las limitaciones de las rotaciones debido a las lesiones –la última, la de Perbela, mientras que Santi Barceló ha jugado tocado del isquio–, sumado a la expulsión de Tavares, ha hecho que se complicase el guion.
Define que lo bueno es el resultado y el pase a la siguiente ronda, ya que el partido ha sido “para olvidar”, destacando solamente 15 minutos buenos en la segunda mitad. “Nos ha servido para irnos de 6, pero nos hemos pensado que lo teníamos y eso, sumado al cansancio físico, les ha metido a ellos”, analiza.
Traslada que estos partidos no son nada fáciles y pone de ejemplo a los equipos de ASOBAL que han caído ante otros de Plata. “Siempre es difícil jugar en campos así”, señala Jiménez, quien declara que ahora toca descansar, pues el domingo les toca otra “batalla” en Pamplona ante Anaitasuna.