Pocas conclusiones señala Lidio Jiménez, entrenador del Rebi BM Cuenca, las que hay que sacar tras la derrota que han sufrido ante el BM Logroño (36-26). El técnico no se corta a la hora de reconocer que los riojanos les han superado en todo, aportando por otra parte que el equipo tiene que reflexionar, levantar la cabeza, ser humildes y seguir trabajando.
El veterano míster conquense apunta que ha sido “un partido para olvidar, un desastre en todo”. Apunta así a que el Logroño ha estado mucho más concentrado e intenso, tanto es así que “no parecíamos nosotros”, declara, en relación a que el equipo ha hecho la guerra por su cuenta en una disposición muy individualizada, sin hacer buenos repliegues, sin correr al contraataque y perdiendo muchísimos balones. “El equipo ha desaparecido del mapa, hemos dejado de creer muy pronto en lo que nos ha hecho estar terceros”, lamenta.
Como no puede ser de otro modo, de esta derrota tan solo espera que los suyos puedan aprender y mejorar. “Hay que ser humildes, bajar la cabeza y trabajar como tenemos que trabajar, porque si no es difícil ganar en cualquier campo”, declara Jiménez.
En su cabeza está ahora tan solo el partido del próximo sábado ante Anaitasuna, que califica con la misma importancia que este, ya que son dos puntos a conseguir.