Tras la victoria del Ciudad Encantada por 28-27 ante Ángel Ximénez Puente Genil, el entrenador del equipo conquense, Lidio Jiménez, ha ofrecido sus impresiones post partido. Contento por ver a su equipo dando el callo en una situación de mucha presión, no se quiere dormir y ya piensa en el próximo choque para certificar la permanencia sin sobresaltos ni promociones.
Lo califica como un partido de “alta tensión” que podían haber cerrado mucho antes: alude así a la gran cantidad de tiros de 6 metros que han fallado, siendo lo normal que se hubiesen ido de 4, 5 o 6 goles para terminar tranquilos. “Hay que mirar la efectividad, porque si no metes, sufres”, explica. No obstante, señala que era un partido importante y que los suyos han dado la cara. “Había mucha presión y lo hemos sacado con trabajo, no tanto con brillantez, pero con trabajo, que era lo obligatorio”, transmite. Se va notando el ir recuperando gente lesionada, sobre todo en esa primera línea en la que alaba el partido de Tchitombi o Teixeira.
Por otra parte, señala que, aunque han sufrido más de lo que tocaba, lo importante era ganar, ya que “todo el mundo aprieta” en estas últimas cuatro jornadas. “Nos viene bien enlazar dos victorias, seguimos dependiendo de nosotros mismos que es lo que queríamos, pero tenemos que ir a ganar porque la semana que viene tienes otro partido igual o peor”, avisa.
Llega a reconocer que incluso están mejor fuera de casa que en El Sargal, aunque lo prioritario ahora es seguir recuperando efectivos para darle un respiro a la primera línea. “Necesitamos recuperar a Pozzer, es la clave. Diego está jugando muchísimos minutos y necesitamos a Pozzer para Huesca”, concluye Jiménez.