Punto que “sabe a poco” el que consiguió el Rebi Cuenca ante el Villa de Aranda en El Sargal. Partido que los conquenses tuvieron controlado durante buena parte y que, aunque pudieron cerrar, acabó cayéndose en una mala segunda mitad.
Lidio Jiménez, entrenador del Rebi BM Cuenca, lo califica como “un partido muy trabado desde el principio”, si bien valora el buen nivel defensivo ofrecido en ambas partes. El punto de inflexión, lo sitúa, como cabía esperar, en la segunda mitad. “Cuatro tiros seguidos de 6 metros fallados, ellos aprovechando contras, dos pérdidas seguidas de balón… se meten y es un partido nuevo”, señala el míster. Sumado a varias exclusiones “tontas”, engloba todo en estos segundos 30 minutos en los que “no hemos sabido leer su defensa”.
Aunque cada parte ha sido para un equipo y el resultado “es justo”, reconoce que el punto sumado le sabe a poco en vista de que podían haber cerrado antes el resultado. “Si en los 10 primeros minutos de la segunda parte acertamos la mitad, el partido está ganado. Si regalas y perdonas, puede pasar que te saquen un punto o dos”, lamenta el conquense.
Por otra parte, señala que el equipo también ha acusado la falta de físico en la parcela central, ya que Tchitombi ha jugado lesionado al no estar Sergi Mach –baja de larga duración-.
En suma, detecta que ha visto a los suyos incómodos en el juego, cansados y faltos de fluidez, por lo que habrá que trabajar en estos aspectos, especialmente en los minutos finales, para que no se vuelva a repetir esta situación.
El Rebi Cuenca tendrá la oportunidad de desquitarse el próximo martes 17 en casa a las 21 horas, cuando reciba al BM Guadalajara.