“No recuerdo ningún equipo juvenil de Cuenca, no que haya sido campeón regional, sino que esté luchando de tú a tú con todos los rivales y sea considerado favorito como la de esta generación. Ni siquiera de la época de Hugo o Sergio López, lo que dice mucho de que se están empezando a hacer las cosas bien”.
Así de determinante equipara a su equipo el técnico del Incarlopsa Cuenca juvenil, Jorge Domínguez, con las generaciones pasadas de la cantera conquense. Los pupilos de Domínguez están haciendo historia. Pese a que Domínguez insiste en andar con pies de plomo, es innegable el desparpajo que está mostrando el equipo conquense que la última vez que perdió un partido oficial fue en diciembre de 2019.
“El crecimiento es tremendo. Ni siquiera yo me lo esperaba que fuera tan evidente y en tan poco tiempo. Ya en la primera vuelta del año pasado se comenzaron a ver progresos y nada más arrancar el 2020 fue algo exponencial. Conseguimos ganar a Marianistas y empatar contra Guadalajara, los dos “cocos” de la liga el año pasado junto al Balonmano Alarcos de Ciudad Real, que este año es líder del otro grupo y, sin duda, el rival a batir”, explica el técnico.
Y es que el conjunto canterano es un fiel reflejo del primer equipo en cuanto a intensidad, entrega y sacrificio se refiere, eso constata “los resultados fabulosos que estamos teniendo”. Jorge admite con orgullo que tanto los jugadores que se entrenan con el primer equipo como el resto “son exigentes y disciplinados”.
De esta forma, la preocupación del técnico de que hubiera diferencias importantes entre un grupo y otro dentro de su vestuario se ven equiparadas “porque hay un pique sano que se resumen en que ven a un compañero esforzarse y los demás van detrás para que el listón de la exigencia esté lo más alto posible”.
No es para menos pues, un buen puñado de jugadores del equipo de esta categoría también suma minutos con el equipo filial, dentro de la idea de que los jugadores compitan lo máximo posible y “mamen” mucho balonmano.
Al equipo conquense le restan sólo dos partidos antes de finalizar una primera fase, ambos a domicilio. Este sábado ante Villafranca y el próximo fin de semana ante Deportivo Retamar, en Pedro Muñoz. Un choque en el que se decidirá el liderato pero lo que Domínguez mira más son los puntos, “pues este año pasa como en la ‘Main Round’ de los mundiales, se clasifican los tres primeros con los puntos logrados ante sus otros dos rivales de grupo y luego juegan un total de seis partidos contra los otros tres equipos del otro grupo, y sólo el campeón va al Campeonato de España juvenil. Es el objetivo, tanto yo como los chicos sólo pensamos en ser campeones”. Un ambicioso objetivo para seguir haciendo historia.
