De toda la gente que estuvo presente el pasado sábado en el Pabellón 1 de Mayo, Talavera, hay una persona que jamás olvidará esa noche: Juan Tovar. El púgil conquense, tras años de duro entrenamiento, ha iniciado su incursión en el boxeo profesional con una victoria ante el ya experimentado Sandro Hernández, a quien venció en los puntos por 35-40. Una victoria que le sabe a oro a ese chico de Cuenca que un día soñaba con pisar el ring de manera profesional.
AÑOS DE ENTRENAMIENTO
Esta historia comienza en el 2014, y asegura Juan que toda esta transición hasta su más reciente debut profesional ha sido natural, sin un objetivo premeditado. Al igual que la fecha del sábado 26 de febrero quedará grabada en su mente, también lo hizo la de su primer combate: 12 de marzo de 2016. “A partir de ahí ha sido todo sin pensar, a lo que venga”, bromea Juan, que en los últimos meses sí reconoce el haber notado que su estado de forma y experiencia le permitía dar un paso adelante.
De hecho, hubo una chispa que le impulsó a lanzarse a esta nueva aventura. Explica que en su primer año fue subcampeón de Castilla-La Mancha, pero al no acudir el ganador al torneo nacional, fue Juan quien estuvo en la cita. “Seguía mucho los campeonatos de España y verme allí me motivó mucho”, revela el joven de 25 años, que desvela que fue un punto de inflexión en su mentalidad, haciéndole ver que quería volver a estar en torneos de tamaña categoría.
“Cuando gané el combate sentí que esto solo acababa de empezar. Ha terminado esto, pero quiero más”CONEXIÓN CUENCA-ELCHE
La vida le llevaría a tierras ilicitanas después del verano del 2020. Como estudiante de Relaciones Laborales y Recursos Humanos, la beca SICUE -programa de movilidad entre universidades españolas- le llevaría hasta la Universidad Miguel Hernández, donde bien sabía el boxeador lo que se iba a encontrar: “Aquí estaba el Evolution Boxing Club, había peleado aquí alguna vez y es el mejor gimnasio de España de boxeo”, revela Juan, que apostilla que no podía desperdiciar esta oportunidad.
Prolífica estancia la del joven conquense, que cuando llegó se proclamó campeón de la Comunidad Valenciana en categoría amateur. En 2021 sería campeón internacional en Lisboa para luego hacerse con el cinturón de campeón neoprofesional -categoría consistente en cuatro asaltos sin camiseta pero con vendaje amateur-.
UN DEBUT DE ENSUEÑO
El esperado día acababa en forma de victoria para Juan, que reconoce que no tenía presión alguna en la cita por estar donde quería. Sí notaba ese cosquilleo de nervios propio de días así, pero asegura que todo se pasaba una vez subido al tapiz.
Y es que al joven púgil le gusta entrar pisando fuerte. Metafórica y literalmente, ya que desvela que uno de sus rituales es entrar al ring dando un fuerte pisotón al suelo con el pie derecho. “Lo hice una vez y me dio suerte, ahora me hace decir algo como: estoy aquí”, comenta entre risas.
En la señalada pelea, Juan fue capaz de llevar el ritmo desde el principio, señalando el propio púgil que su mente estaba en mantener la cabeza fría y no cometer errores de precipitarse. En el último cuarto fue capaz de tirar a Sandro y, por el planteamiento del combate, Juan señala que ya preveía la victoria. Insaciable, señala que sentía que su trayectoria acababa de empezar tras haber ganado. Agradece el grandísimo apoyo recibido en Talavera, donde acudieron muchos conquenses. “Fue increíble, parecía que estaba peleando en casa”, comenta Juan.
“Vino un montón de gente de Cuenca, fue increíble. Parecía que estaba peleando en casa”PENSANDO EN MÁS
Como dice Juan, esto solo acaba de empezar. Es por ello que ahora su objetivo pasa por tener continuidad y tratar de rankearse para obtener algún título. “Queremos hacer otra pelea para abril o mayo”, adelanta Juan.