Familiares, amigos, excompañeros de equipo, concejales, representantes empresariales y de la Semana Santa, artistas, periodistas deportivos, admiradores... Más de un centenar de personas han acompañado este domingo al entrenador Joaquín Caparros Camino en el acto de homenaje preparado por Ayuntamiento y Diputación y que ha servido para que el nombre del campo de fútbol de ‘La Bene’ pase a denominarse, para siempre, campo de fútbol Joaquín Caparrós Camino.
Emocionado, el que fuera entrenador del Sevilla, del Athletic de Bilbao o del San José Obrero ha agradecido el tributo “con la mano en el corazón” y asegurado sentirse lleno de orgullo.
Aunque sevillano de nacimiento, se ha reconocido como un conquense “de adopción y sentimiento” y ha expresado su alegría porque la ciudad se cruzara en su camino cuando tenía poco más de veinte años. Aquí jugó unos años en el Conquense y se sacó el título de entrenador, tarea que inició en el San José.
Ha destacado así su vinculación tanto “profesional” como “personal” a Cuenca, de donde es su mujer y donde nacieron sus hijos, donde, como se ha demostrado en el multitudinario acto de este domingo, tiene tantos “amigos que son hermanos. Esta es mi casa, donde no me llaman Joaquín o míster, como en otras ciudades, sino ‘Capa’. Y me gusta que me llamen ‘Capa”.
Los asistentes al acto, conducido por el alcalde, Ángel Mariscal, y en el que también han intervenido el presidente de la Diputación, Benjamín Prieto, y el presidente de la Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha, Antonio Escribano, han podido contemplar un mural en homenaje a Caparrós elaborado por Mr. Trazo, así como la placa con su nombre y dos apellidos instalada a la entrada del recinto. También se ha rotulado su nombre junto a la grada. Caparrós ha recibido asimismo una escultura de Adrián Navarro. Y cálidos aplausos y abrazos.