Descubrir la región en moto: esa es la nueva iniciativa de la Asociación Dinorider de Cuenca, que en esta ocasión traspasará las fronteras de la provincia con su primera edición de la Indiana Rider. Un concurso pionero de motocaching en el que los participantes tendrán que buscar un lugar concreto –motocaché– y verificarlo mediante una foto acompañado, por supuesto, de su fiel montura de dos ruedas.
Esta iniciativa nace de la necesidad de organizar una gran actividad motera en años pares, ya que los impares se celebra la Dinorider –que espera su tercera edición en 2025–. “Había que hacer alguna actividad que potenciara el mototurismo”, cuenta Santiago Langreo, presidente de la Asociación Dinorider. Así pues, tomaron inspiración de una actividad organizada por el Moto Club Bajo Cero de Teruel y le dieron una vuelta para organizar la Indiana Rider. Como señala el propio presidente, no se está haciendo nada parecido en otro lugar de España.
Esta actividad se desarrollará del 1 de mayo al 15 de septiembre y consistirá en hallar, a través de una serie de pistas e imágenes que se proporcionarán a los participantes, un lugar singular de la región al que deberán acudir para hacerse una foto con su moto. Habrá cinco puntos, uno por cada provincia de Castilla-La Mancha.
La inscripción, abierta desde ayer, ya cuenta con 12 apuntados, y el plazo estará abierto hasta el 31 de agosto. No obstante, cuanto antes se apunte el interesado, más tiempo dispondrá para localizar estos lugares secretos que llevarán al motorista, informa Langreo, a recorrer más de 800 kilómetros a lo ancho y largo de la región. Tendrá un precio de 15 euros y todo lo recaudado irá destinado a premios –material motero– para los participantes, que podrán apuntarse con cualquier tipo de motocicleta, independientemente de la cilindrada. No hay límite de participantes, aunque desde la organización señala que alcanzar el centenar sería un gran éxito.
LA SAN PISTÓN LE DARÁ GAS AL MOTOTURISMO
Otro de los proyectos que tiene en mente la Asociación Dinorider tiene que ver con la Ruta de San Pistón. Observando que la Ruta del Silencio –por La Serranía de Cuenca– es visitada por un gran número de motoristas, señala que es hora de poner en valor también la Ruta de San Pistón, la cual es “muchísimo mejor”. Tanto es así que hay empresas que organizan eventos o desafíos en esta ruta, lo cual es algo que Dinorider quiere aprovechar. “Observad el potencial que tiene esto en cuanto a alojamientos, gastronomía…”, señala Langreo. De hecho, adelanta que en los planes de la asociación está solicitar el Refugio de Alto de la Vega para que se pueda pernoctar y seguir redescubriendo la provincia.
Esto es algo que también pone de manifiesto Yolanda Rozalén, coordinadora de Cultura de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, quien ha resaltado el alto número de participantes –más de 200– que reunió la última Dinorider, alabando el importante trabajo de la asociación de cara a descubrir las virtudes de la región al mismo tiempo que se potencia la economía.
Por otra parte, el Día de la Moto, todavía está en fase de elaboración y diseño, aunque está previsto que se celebre el segundo fin de semana de junio.