El Balonmano Incarlopsa Juvenil se impuso por 21-25 al Balonmano Villafranca y se aseguró con este resultado, unido al empate entre el Balonmano Guadalajara y el Deportivo Retamar (23-23), ser campeón de su grupo a falta de una jornada para la conclusión de la primera fase.
Los de Jorge Domínguez sacaron tuvieron que sacar un complicado encuentro en el que fueron de menos a más, aupados por la eficacia goleadora de un entonado Jaime Colmena (9 goles) y Armando Arce (8). No obstante, el Villafranca comenzó comandando el marcador durante los primeros minutos en los que las defensas se impusieron a los ataques. De esta forma, los conquenses estuvieron a remolque durante los 25 primeros minutos de encuentro, logrando resarcirse en el último parcial de juego del primero tiempo donde endosaron un parcial 0-3 para irse al descanso con descanso mínimo (10-11).
En la reanudación, los conquenses se mantuvieron por encima y poco a poco fueron ampliando la ventaja paso a paso. No fue fácil el tramo final cuando, superando por dos goles a su rival (18-20) el equipo se quedó cuatro minutos en inferioridad numérica por la doble exclusión en el minuto 49 y el 52 de Álvaro Martín. A pesar de ello, el Incarlopsa aguantó la situación y no sólo no cedió su ventaja, sino que la aumentó hasta el definitivo 21-25.
Este triunfo, el 7º en lo que va de la temporada, confirma como campeón del Grupo II al equipo conquense, ya que el Deportivo Retamar, su inmediato perseguidor, empató a 23 ante el Balonmano Guadalajara. De esta forma, los conquenses se aseguran pasar como primeros de grupos a la fase final, si bien es algo anecdótico, ya que el Incarlopsa sólo contará en la siguiente fase los puntos contra los rivales que accedan a esta misma fase, es decir, 6 puntos hasta el momento de terminar así el grupo (dos victorias ante Guadalajara y una ante el Deportivo Retamar). Este fin de semana, los de Jorge Domínguez viajarán hasta Pedro Muñoz (sábado, 17:30 horas) para disputar su último partido ante el Deportivo Retamar. Un choque importante para los intereses de los conquenses, ya que de ganar accederían a la siguiente fase con el máximo de puntos posibles.