Con la suspensión por parte de la administración local de la Feria y Fiestas de San Julián, Cuenca no se quedará sin concurso hípico, al menos es lo que está en las previsiones del calendario de la Federación Española de Hípica y en la mente de la organización de este concurso, el Club Hípico Los Faldones, concesionario del recinto de la Hípica de la capital.
Pero por falta de uno, habrá dos concursos que sustituirán al tradicional Concurso de Salto de Cuenca, que habría celebrado la 65ª edición en este 2020. "Es lo que se pretende desde el comité organizador, pero todo depende de la evolución de la situación de la pandemia. Ambas pruebas están aprobados por la federación y la idea del comité es llevarlos a cabo", defiende Borja Herráiz, organizador de este evento en anteriores ediciones.
La propuesta que tendrá al Club Los Faldones como principal impulsor se traduce en un primer concurso de tres días con otros tres días de descanso al que le seguirían un segundo torneo con cuatro días de competición. "La diferencia sería la altura de las pruebas y el importe de los premios. Lo más apropiado es hacer un 'dos estrellas' al estar tres meses parados la mayoría de jinetes. Arrancar con unas pruebas sencillas y entrar poco a poco en el ritmo de competición. Por otro lado, el segundo concurso hablamos ya de una altura de 1,40 metros, es alta competición", indica Herráiz.
La gran dificultad de esta iniciativa será el realizarlo sin la ayuda del Ayuntamiento de Cuenca, puesto que al suspender la Feria y Fiestas de San Julián no asistirán al concurso hípico asociado a esta festividad. "El ayuntamiento ha decidido no colaborar, lo cual hará que cueste un poco más llevarlo a cabo, nos tendremos que adaptar, pero es importante mantener la tradición hípica para que Cuenca sea referente", defiende Borja que advierte que "el perder el concurso por estas fechas puede hacer que los jinetes dejen de contar con el concurso conquense el próximo año a la hora de planificar su calendario de competición".
"Es fundamental que haya algo para que los jinetes lo tengan siempre presente, haya más o menos público, pero es importante no perder esa tradición", añade.
El apostar por un doble concurso es algo que ya se venía tanteando desde ediciones anteriores por la amplia logística que es necesaria en el recinto. "Es un montaje muy grande para 4 o 5 días: cuadras, stands, gradas, etc. Es un esfuerzo muy grande. Es por eso que es viable aprovechar todo ello para dar la oportunidad a los jinetes de tener una doble experiencia al evento principal, e incluso si hay reducción de aforo, para que el público pueda asistir a uno de los dos eventos". Como valoración personal, Herraiz señala que esta propuesta es "viable" dada la cercanía en la tradicional cercanía en las fechas de Cuenca con el concurso de Ávila, el cual no se celebrará este año, "pero si este año se consigue que los jinetes puedan participar y tener una gran impresión del evento, que se vayan contentos, es posible que en próximas ediciones elijan Cuenca en lugar de otros destinos, al final se trata de probar este tipo de propuesta de doble concurso para mejorar en todos los aspectos al darse condiciones favorables para ello".
PÚBLICO Y APUESTAS
Otra de las grandes incógnitas sobre este doble concurso estará en el papel del público. Herraiz recuerda que "se están ampliando los aforos y, por ejemplo, en las plazas de toros se está permitiendo hasta 1.000 personas. A lo mejor no se puede contar con una asistencia del 100%, pero si de un porcentaje aceptable. De momento hay que ver como evoluciona la situación y seguir al pie de la letra las instrucciones y medidas de seguridad".
Respecto a las apuestas, con el cambio de legislación y la no participación del Ayuntamiento de Cuenca como organizador del evento al suspenderse la Feria y Fiestas de San Julián, se descarta la posibilidad de que puedan realizarse apuestas como tradicionalmente se había hecho en este tipo de eventos.
No obstante, desde la organización avanzan que "se está negociando con entidades para poder mediar en este asunto, buscando una solución alternativa al hecho de no contar con la administración pública como organizador".