Ante el aumento de las restricciones y la modificación del Nivel 3 que ha conllevado al cierre de gran parte del sector hostelero, ante la imposibilidad de rentabilizar el servicio de terraza como único espacio disponible para servir, el ámbito de los gimnasios mira con incertidumbre el posible nuevo paso de las administraciones ante la amenaza de un cierre obligatorio.
El Nivel 3 en el que está Cuenca capital, al menos hasta el próximo 20 de noviembre, limita a los gimnasios e instalaciones deportivas al 20% de aforo en espacios cerrados y al 50% en recintos exteriores.
Esta situación ha afectado de manera considerable, entre otros, al establecimiento de La Casa del Agua Sport. Laura Belmar, gerente del espacio deportivo, defiende la actividad del sector como “fundamental para la salud, dada la cantidad de estudios que afirman que el deporte es esencial”.
Así, declara que la situación en este sector es de “apoyo mutuo” ante las dificultades y la incertidumbre. Si bien, confiesa el agravio que sufre su instalación al tener que estar desde el pasado 17 de octubre “con el recinto de la piscina y el spa cerrados”.
Belmar explica que “hay estudios del Ministerio de Innovación sobre el Covid en el que señalan que el virus no sobrevive en el agua de las piscinas”. Y es que si la situación con la regulación anterior, “limitando a sólo un nadador por calle, sólo gente federada y los grupos reducidos en cursos ya era difícil”, el cierre completo es “contraproducente”.
La gerente de este gimnasio pone el ejemplo de que la normativa permite el aforo de un 25% en piscinas de urbanizaciones, mientras que el resto “sean de titularidad público o privada tiene que cerrar pese a que en nuestra instalación hay personas que vigilan que se cumplen las medidas higiénico-sanitarias”. Con este panorama, y ante las respuestas negativas cuando se solicita volver a la reapertura controlada por el empeoramiento de los datos, desde este gimnasio solo esperan “que nos dejen seguir conforme estamos, pues el cierre tendría consecuencias horribles”.
“Redoblamos esfuerzos, asumimos las restricciones y no subimos las cuotas”
Luis es el gerente del gimnasio VITAE. Este espacio de la capital conquense se ha visto inmerso en los cambios que ha traído esta nueva situación que se ha transformado en “mascarillas, geles, utensilios de limpieza y desinfección y limitación de aforos en las actividades”.
Este gimnasio ya ha adaptado sus clases al nuevo 20% máximo de aforo, “algo para lo que no hemos tenido que hacer reformas, pero sí se nota a la hora de poder impulsar actividades”, explica el gerente del gimnasio que agradece “la gran dedicación de los clientes fieles, pues hemos notado una rebaja en las inscripciones, sobre todo en esas épocas antes y después del verano en las que mucha gente se apuntaba al gimnasio y que ahora no lo ha hecho. Es algo que afecta a tus ingresos, pero tampoco podemos subir las cuotas, porque también es una situación difícil para nuestros deportistas”.
Desde Vitae defienden que los gimnasios se reconozcan como servicio esencial, “porque cumplimos una estricta normativa sanitaria” que ya se ha llevado por delante en este espacio actividades como “las clases de distintas artes marciales”.
"“El ejercicio es sinónimo de salud, está demostrado que ayuda al sistema inmune”Ramón Fernández dirige el espacio deportivo de Magdala Sport. Su situación no es distinta de la que temen el resto de espacios del ámbito deportivo, y es por ello que pone sobre la mesa la importancia para la salud del poder permitir a las personas hacer deporte: “A todas. Uno piensa a los gimnasios sólo acuden personas sanas y no es así, aquí estamos tratando gente que se recupera de lesiones, con hipertensión, diabética, con dolores de espalda, etc. y también otros que acuden para mantenerse saludables física y mentalmente”.
Fernández además destaca el documento emitido por el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias en las que señala que “sólo un 0.22% del total de los casos de COVID-19 en España se ha producido en actividades deportivas”. “La actividad física y el deporte es algo que refuerza nuestro sistema inmune, por nombrar uno de los muchos beneficios que genera en nuestro cuerpo”, por eso teme que una actividad que cumple a rajatabla con las normas y demuestra el mínimo nivel de contagios eche el cierre, con las “terribles consecuencias que conllevaría”.