El Liberbank Cuenca juvenil retornó a la competición tras el parón navideño y aplazar el que hubiera sido su primer partido del año ante el Balonmano Manzanares. Así, el cuadro de Daniel López, técnico que se coronó junto a Rafa López como campeón de la Copa del CESA Balonmano 2019, encaró este primer compromiso ante un potente rival como el Balonmano Pozuelo.
Los conquenses no comenzaron de la mejor manera el choque, con un parcial desfavorable de 0-4. Sin embargo, supieron reponerse a la adversidad apostando López por una dinámica más arriesgada en ataque con jugadas rápidas de 1ª y 2ª oleada en lugar de la táctica ofensiva más posicional, que poco funcionó ante la bien pertrechada línea defensiva del Pozuelo. De esta manera, los conquenses igualaron fuerzas en el tanteo (8-8) y el choque entró en una dinámica de poder en el que las defensas fueron claramente superiores a los ataques. Un hecho al que hubo que añadir el buen hacer de los guardametas de ambos equipos, tanto de Borja García como Pablo Cano en el bando conquense, como Fernando Barragán en el equipo visitante.
Tras el descanso, la racanería en cuanto al goteo de goles se convirtió en una constante, siendo cada ataque convertido crucial de cara a llevarse la victoria. Así, en los últimos minutos, dos pérdidas en ataque conquenses desestabilizaron una balanza en el electrónico. López tuvo que arriesgar de nuevo con la defensa más abierta buscando el robo de posesión, sin embargo, el Pozuelo finiquitó el partido yéndose hasta los cuatro tantos de ventaja con los que finalizaría la contienda (17-21).
Además de la actuación de los porteros, también fue decisivo el acierto visitante de Enrique Cruz y Enrique Chacón, con 9 y 5 goles respectivamente. Por el Balonmano Cuenca juvenil destacó Alejandro García 'Chinin' con 7 tantos, pero también con algo de mala suerte dado que estrelló varios lanzamientos al travesaño, cuando no se encontró con la intervención felina del portero rival para evitar el gol.
El técnico conquense señaló "el nuevo final sin fortuna" en otro partido de los suyos. López si puso en valor el hecho de "haber competido ante los mejores", sin embargo denostó el factor decisivo de llevarse el partido en los minutos importantes: "No sé si es por mentalidad, fondo o mala suerte, pero sumamos un nuevo partido en el que la victoria no cae de nuestro lado", señala. A pesar de todo, el entrenador del equipo juvenil hizo hincapié en la gran labor defensiva de los suyos "obligando a Pozuelo a realizar ataques muy largos y forzando pasivos continuamente", añadía.
El próximo partido para el equipo juvenil será este sábado 26 ante el líder, Prado Marianistas, en el que además de realizar una gran partido, los conquenses tratarán de acabar con la imbatibilidad del equipo marianista que cuenta sus partidos por victorias hasta ahora.
