El CB Cuenca sufre ante un intratable Dentatis Puertollano

El CB Cuenca afrontaba este encuentro como una auténtica final en su lucha por la salvación, aunque ya sin esperanzas. Los nervios iniciales jugaron en su contra, permitiendo que los visitantes arrancaran con un contundente parcial de 1-11. A pesar del esfuerzo y la entrega de los jugadores conquenses, la diferencia en el marcador se ha convertido en una losa demasiado pesada durante todo el encuentro.

El partido comenzó con una afluencia de público discreta, pero con el CB Cuenca mostrando intención de competir. Sin embargo, los tiros no entraban y, mientras tanto, los visitantes no solo no fallaban, sino que castigaban con triples cada desajuste defensivo de los verdillos. Así, el primer parcial de 1-11 dejó claras las dificultades de los locales desde el arranque.

Gonzalo asumió galones y, tirando de carácter, logró recortar la diferencia hasta los cinco puntos (15-20), encendiendo las esperanzas del equipo y la grada. No obstante, el inicio del segundo cuarto frenó la reacción conquense y devolvió la ventaja visitante a los 10 puntos. (15-25)

Sobre la cancha se apreciaba una clara desigualdad. Mientras algunos jugadores, como Gonzalo, Bruno y Sergio, trataban de tirar del equipo, otros parecían más cansados y poco efectivos en el rebote y los bloqueos. La defensa local se convirtió en un coladero para un Dentatis Puertollano que, en ataque, se mostró como una máquina perfectamente engrasada. Se llegaba al descanso con 24-34 y con las ganas de tirar la toalla reflejada en la cara de los jugadores conquenses.

El tercer cuarto fue más de lo mismo, solo que la distancia se ampliaba en más de 20 puntos a favor de los visitantes y la frustración cundía entre los jugadores locales, incapaces de encontrar acierto incluso desde la línea de personal. (32-53)

El partido se detuvo cuando un jugador de Puertollano sufrió una lesión en plena acción ofensiva a falta de 8 minutos para finalizar el encuentro. En un gesto de deportividad, sus compañeros lo retiraron de la cancha entre aplausos de la afición presente. Les vino bien el parón a los Conquenses ya que atacaban con más orden, pero la precisión en los lanzamientos seguía fallando y parecía que la canasta contaba con un repelente ante los lanzamientos verdillos. (39-66)

Con la lesión parecieron adormilarse los de Puertollano y relajaron la ofensiva, con lo que el Cuenca empezó a dar pinceladas del equipo que debía ser, aunque ya fue demasiado tarde y terminaron perdiendo el encuentro en un aplastante 52-77.

Los conquenses se quedan los penúltimos de la tabla y deberán luchar al año que viene por volver a la liga nacional.