Gran comienzo del Club Baloncesto Cuenca en Primera Nacional, donde ha tenido que esperar un poco para competir tras dos partidos aplazados. Pero nunca es tarde si la dicha es buena, algo que han conseguido tras imponerse por 60-56 al Becares Cervantes Ciudad Real.
Tardaron un poco en llegar los primeros aciertos de los verdes, que tomaban color con las canastas de Álex Álvarez y Aguilar. Igualado tanteo en estos primeros minutos en la pintura, ya que nadie conseguía despegarse del marcador en un toma y daca. Con el 12-14, Jaime Muñoz vio algo a corregir en su equipo y solicitó un tiempo muerto en el que los reordenó a la perfección: hicieron mucho daño con el tiro exterior y Loren Ruiz ponía la puntilla con un triple desde el ala derecha. Finalmente, el 20-14 dejaba ver a un CB Cuenca en crecimiento.
Continuaba la buena tónica el cuadro de Jaime Muñoz durante el segundo cuarto, ampliando la ventaja hasta los 10 puntos cuando Lorenzo Ruiz aprovechaba desde la línea de tiro libre (27-17). No obstante, el Cervantes no se iba a dejar caer y pronto recortaron hasta el 27-21, momento en el que se paraba de nuevo el juego para frenar esta tónica ascendente de los visitantes. Un triple de Berasategui le daba aire al equipo verde, pero el acierto de Ciudad Real continuaba hasta ponerse a tan solo un punto (30-29). Finalmente, la igualdad siguió hasta el 33-32 con el que el partido se iba al descanso.
Consumaba el cuadro ciudadrealeño esta mejoría remontando en el marcador y ampliando la ventaja, aunque pronto se volvía a poner a la altura un CB Cuenca que este partido contaba también con la ayuda de su propio entrenador, Jaime Muñoz, en la pista, ya que dispone de ficha de jugador y debido a la corta plantilla ya avisaba de que podría verse en la obligación de jugar esta temporada. Hasta cinco puntos por arriba se puso Cervantes, si bien Cuenca logró recortar hasta el 46-49 con el que terminaba el tercer cuarto.
Inmejorable salida de los conquenses a este último cuarto, poniendo un parcial de 7-0 que dejaba KO al Ciudad Real. No estaban encontrando su sitio en ataque los rojillos, que palidecían ante la gran defensa local. Esta defensa fue clave hasta el punto de que se pidió un tiempo muerto a falta de 3 minutos y medio, momento en el que los visitantes todavía no se habían estrenado en este periodo. Lo hicieron seguidamente, eso sí, con un triple. Pero no iba a dejar escapar la ventaja el CB Cuenca, que finalmente respiraba cuando Álex Álvarez mataba el partido con un triple a falta de 43 segundos. El partido se cerraría con un 60-56 que dejaba los dos puntos en casa.
Gran victoria para los conquenses, que contaban con que sería difícil este inicio de liga debido en primer lugar a lo novedoso de la plantilla y también por el hecho de que llegaban con menos rodaje por esos partidos aplazados. Esta grata sorpresa deja ver brotes verdes en el CB Cuenca, que, más allá del resultado, trabajó bien como equipo y se adaptó a las circunstancias.