Ambiente inigualable en El Sargal que retomaba la competición como primer escenario de disputa de un título en la campaña 2019/2020, la Supercopa ASOBAL. Lleno hasta la bandera, el templo conquense del balonmano recibía al imperioso Barça ante los espartanos conquenses, que soñaban que este reducto polideportivo se convirtiera en todo un paso de las Termopilas para su rival.
El partido comenzó con poco acierto en los primeros lances, pero en la medida que los goles comenzaron a subir al video marcador de El Sargal, Cuenca puso durante los primeros cinco minutos el empeño para que el azulgrana tuviera algunas espina en su camino de rosas hacia el título.
Dutra estableció la única ventaja conquense del partido con el primer tanto, a partir de ahí, los de Lidio aguantaron fervorosamente (3-4) pero tras el primer parcial, los errores y pérdidas en ataque y los eléctricos contraataques de Víctor Tomás y Aitor Ariño dieron un parcia de 0-3 que los locales contestaron con el buen hacer sobre la línea de Moscariello. El argentino se columpio entre bestias por delante de los seis metros como un trapecista lanzándose a por las asistencias de sus compañeros para no fallar ante un inspirado Gonzalo Pérez de Vargas que fue la bestia negra para el resto de la ofensiva conquense.
El Sargal se vino arriba al verse a sólo un gol de su rival (7-8) con los cañonazos de un Dutra que le costó entrar en el partido, pero en la medida que Lidio y Xavi Pascual pusieron sobre el tablero las rotaciones, el potencial de Barcelona desbordó a Cuenca, yéndose de nuevo en el marcador hasta el 8-12, obra de Dolenec.
Entrados en los últimos minutos del primer periodo, Leonel Maciel ganó protagonismo ayudando bajo el marco de la bicolor a que sus compañeros pudieran meterse en el partido, la distancia vuelve a sólo dos goles gracias a goles de Thiago Alves, Eskericic o Doldán, pero el Barcelona se asegura por medio de Dika Mem y Palmersson de irse con la máxima diferencia de cinco goles al túnel de vestuarios tras los treinta minutos de partido.
SEGUNDA PARTE
Tras el parón, Cuenca volvió a soñar con hacer temblar al titán azulgrana de la mano de nuevo de Moscariello, que marcó tres goles seguidos y, junto a las intervenciones de Maciel, redujeron la ventaja de su rival por debajo de los cinco goles con una afición conquense entonando el “a por ellos oé”.
En medio de estas intentonas por volver a darle sabor al partido, llegaron minutos de descontento del graderío local con la pareja arbitral en ciertas acciones que costaron no solo goles infantiles al Cuenca, sino también evitaron ocasiones al contraataque y finalizaron con un gran estallido tras la exclusión de Natan Suárez por gesticular en exceso después de que los colegiados señalaran golpe franco en una pérdida de balón del Barcelona.
De esta manera se desdibujó el choque y cada vez los visitantes tomaron una ventaja mayor, gracias al mejor portero de la Liga Asobal, Gonzalo Pérez de Vargas, que mantuvo si anotar al conjunto de Lidio hasta siete minutos y dos tiempos muertos de Lidio, desde el maravilloso gol de fly con la asistencia de Pablo Vainstein a Sergio López en el minuto 17 de la segunda parte (20-25), hasta que Samuel Ibáñez logró marcar desde su portería cuando el Barcelona realizaba la estrategia de portero jugador en el minuto 24 (21-29).
Cuando el choque encaraba su recta final, el mejor jugador en el escenario a orillas del Júcar, la afición conquense, comenzó a festejar el evento que ha puesto en el centro de todos los focos del balonmano a la ciudad con la celebración de la Supercopa. La ola surcaba de una punta otra de El Sargal hasta que Hugo López anotó el último gol del partido (22-33) que dictaminó al FC Barcelona como campeón de la Supercopa Asobal, siendo el octavo entorchado para el conjunto de Xavi Pascual.
Tras el pitido final, hubo consolación en los premios individuales para el Liberbank Cuenca, que se llevó el premio al mejor jugador, que se fue para Sergio López, y el máximo goleador del partido, para Lucas Moscariello, mientras que el mejor portero de la final se lo adjudicó Gonzalo Pérez de Vargas. El Barça conquistó su 22 Supercopa de España, motivo por el que David Barrufet, como miembro de Asobal, le entregó un lingote de plata.
22. Liberbank Cuenca (11+11): Leo Maciel; Dutra (4, 1p), Vainstein, Doldán (1), Natan Suárez (2), Moscariello (6) Fekete -siete inicial-, Samuel Ibáñez (p) (1), Lindblad, Baronetto, Hugo López (1), Thiago Alves (3), Marrochi (1), Eskericic (1) y Sergio López (2).
33. Barça (16+17): Pérez de Vargas; Víctor Tomás (4), Aitor Ariño (3), Petrus, Cindric (5), Palmarsson (3), Fábregas (3) -siete inicial-, Moller (p), Raúl Entrerríos, Sorhaindo (2), Andersson, Aleix Gómez (2), Dolenec (6, 1p) y Dika Mem (5).
Marcador cada cinco minutos: 2-4, 3-6, 6-8, 8-12, 11-14, 11-16, descanso, 14-18, 15-20, 18-23, 20-17, 21-30 y 22-33.
Árbitros: Raluy López y Sabroso Ramírez. Excluyeron, por parte local, a Lindblad (2), Marrochi, Thiago, Dutra y Natan Suárez. Por parte visitante, a Petrus (2) y Palmarsson.
Incidencias: Partido correspondiente a la Supercopa de España disputado en el polideportivo El Sargal, que registró un lleno con 2.000 personas y entradas agotadas.
