Con el avance de la desescalada y su situación en Fase 2 con vistas a avanzar hacia una nueva etapa el próximo lunes, la provincia de Cuenca comienza a planificar su futuro inmediato en competiciones que se encontraban expectantes por el desarrollo de los acontecimientos. En esta situación el Club Kite Surf Centro ha podido anunciar con una gran alegría que será el organizador la primera prueba de la Fórmula Kite Spain Series 2020, el circuito de kitesurf nacional que busca fomentar esta disciplina olímpica en Paris 2024 y del que ya formó parte el pasado año como única prueba en aguas interiores.
"En realidad deberíamos haber sido la tercera prueba de esta competición, pero dadas las circunstancias y el aplazamiento de las dos primeras carreras nos tocó tomar parte y mover ficha. Así, y viendo las posibilidades, además de jugar con el hecho de que las competiciones internacionales se habían movido hacia los meses de septiembre y octubre, decidimos movilizar la prueba de primeros de junio al 10-13 de julio, al llegar a un acuerdo tanto el club, la Federación Castellano-manchega de Vela y el Ayuntamiento de Valverde del Júcar", declara a Las Noticias de Cuenca Vicente Ferrís, presidente de CKSC.
La competición se prevé que se celebre siguiendo todas las pautas de seguridad. No obstante, la particularidad del kitesurf hace que sea viable este deporte. "Hay que tener en cuenta que en el kitesurf cada regatista lleva consigo su equipo. Además, por la particularidad de este material, la distancia entre competidores que nos marca la cometa puede ir desde los 10 a los 25 metros, es más que suficiente en el agua. Por otro lado, en tierra será necesario seguir las medidas de distanciamiento de más de 2 metros y sólo en el caso de reuniones de patrones y demás será necesario llevar mascarillas, obviamente contaremos con hidrogeles y demás material para la desinfección de espacios y material". Con respecto a las situaciones de posibles rescates en el agua, Ferrís señala que es un aspecto también muy controlado gracias a "que contaremos con embarcaciones grandes, de casi 5 metros, en las que será fácil mantener la distancia una vez se realice la maniobra de rescate".
PARTICIPACIÓN
Lejos de prever una disminución de participantes, la previsión que maneja el club conquense es de "igual o mayor incluso que el año pasado". Esto se debe a dos factores según defiende Vicente: "el primero serán las gana de volver a surcar las aguas y participar en regatas después de más de dos meses, y el otro sería por la participación que hubo en el Campeonato de España de Kitesurf en el primer fin de semana de marzo, en el que se dieron cita unos 50 regatistas, el doble que en ocasiones anteriores, por lo que nos consta que cada vez hay mayor número de regatistas y más nivel", defiende Vicente que señala el aliciente que supone que esta práctica sea olímpica en un futuro y siga habiendo un crecimiento no sólo en el equipo conquense sino en todo el territorio nacional.
Si bien, a diferencia de como ocurre en otros eventos deportivos, a los participantes no se le realizarán test serológicos, "pero sí tomaremos la temperatura como medida de control, de igual manera advertimos y hacemos un llamamiento de que si algún regatista presenta cualquier sintomatología del virus no acuda a la competición", explica Ferrís.
Otro de los apuntes es la posibilidad de contar con regatistas internacionales como ha ocurrido en anteriores ocasiones. "Hay mucha ilusión aunque claro, el hecho de contar con participantes de otros países dependerá de cómo evolucione la situación. Tenemos la esperanza de que vengan, porque elevaría el nivel de la competición y daría un gran espectáculo".
Con respecto a la otra parte implicada en el evento, el público, el presidente del CKSC cuenta con el viento a favor con el hecho de que el escenario del pantano "es un espacio abierto y de gran extensión, no hay graderíos sino un terreno por lo que se puede dispersar los espectadores y siempre recomendaremos que se sigan todas las medidas de prevención. En el caso de contar con un espacio como un bar o chiringuito, se cumplirá la normativa tal y como señala la ley".
"El lado negativo será esa pérdida de ambiente social y familiar que supone este evento. De normal en las comidas nos reuníamos todos los regatistas para estar unidos, ahora todo estará marcado por mantener las distancias y en el tema de las comidas, en lugar de hacer un buffet libre se preparan raciones individualizadas o 'picnics', se instalarán mesas pero normalmente contamos con el componente de que muchos de los participantes acuden a estas pruebas con caravanas o espacios oportunos".
Así, todo se prepara para que del 10 al 12 de julio, Valverde del Júcar se convierta en el punto de vuelta al kitesurf, con la previsible expectación que levantará este retorno y el positivo impacto que tendrá para la zona, siguiendo en todo momento las medidas de seguridad y prevención.
