La Balompédica ha regresado al trabajo este lunes con una sensación más dulce que agria. Y es que a pesar de la importante victoria en el Miniestadi por 1-2 ante el FC Barcelona B, los conquenses han caído a los puestos de descenso, debido al triunfo del Ontinyent por 3-1 ante el Sabadell. A pesar de ello, el equipo encara de otra manera la semana de trabajo que tendrá además el doble compromiso de partidos: el miércoles ante el Internacional de Madrid, en el choque de vuelta de los cuartos de final de la Copa RFEF (Tras finalizar 1-1 en la ida), y el sábado ante el segundo clasificado del grupo III, el Atlético Baleares, que llegará a La Fuensanta sin saber lo que es perder en este 2019.
Para estas citas la Balompédica ya podría contar con sus últimas incorporaciones, el venezolano Cristian Novoa (procedente del The Strongest boliviano) y el nigeriano Macauley Chrisantus (goleador que llega del Helsinki). Ambos futbolistas se han incorporado a las órdenes de César Laínez que asimila los refuerzos con munición para su ataque: "Vamos a ver cómo se desenvuelven, ahora somos un revólver con balas, hasta ahora éramos un revolver, pero cuando uno no dispara, no puede hacer daño. Es esa competitividad la que permite aumentar el nivel, que cada jugador quiera jugar genera una competitividad que siempre beneficia al público", señalaba el técnico del Conquense.
Respecto a las otras incorporaciones del mercado invernal, mientras Jordan Domínguez ya disputó sus primeros minutos contra el filial blaugrana, el serbio Nemanja MIrosavljevic aún sigue pendiente de arreglar su situación administrativa en el país para poder jugar con el Conquense.