Respira tranquila la UB Conquense, que ya ha certificado la permanencia en Segunda RFEF tras su empate a 1 ante el Real Madrid C. No lo ha hecho sin sufrir, ya que sacar ese punto que necesitaba no ha sido fácil: un fortuito disparo de Bema Sina ha sido el detonante para que La Fuensanta despidiese a los suyos a lo grande, ya que era el último partido en casa de la temporada.
Inicio de partido poco vistoso en el que ninguno de los dos equipos conseguía imponer su juego, si bien era el Real Madrid C el que tenía más “urgencia” de ganar. Ocasiones a cuentagotas, mucho mediocampismo y poco que reseñar durante la primera mitad: un buen balón de Sergio Rodríguez casi es empalado por Joan cuando se superaba la media hora de juego, y por su parte el filial merengue tampoco conseguía inquietar en exceso la portería defendida por Raúl Bernabéu.
En el descanso del partido tuvo lugar un pequeño homenaje a la cantera de la Balompédica, que saltó con todas sus categorías al césped para una foto de familia.
La segunda parte comenzó con sorpresa por parte del Real Madrid C: en la primera jugada de la reanudación, cuando tan solo habían transcurrido unos segundos, un balón puesto por Manu Márquez desde la izquierda recibió una acrobática semivolea de Bruno Iglesias, que logró poner el 0-1.
Le costó al Conquense coger sensaciones tras encajar el gol y no llegaría a ofrecer una respuesta inmediata, aunque el paso de los minutos le sentó bien al conjunto blanquinegro, que empezaba a pisar más área rival.
El punto de inflexión fue la incorporación de Jairo Cárcaba al terreno de juego: nada más salir cabeceó un balón que recibió una gran intervención de Quetglas para enviar a córner. No perdonaría el cuadro local en segunda instancia: Héctor Rubio sacó en corto y la jugada acabó en la frontal del área, donde el defensa Bema Sina se animó con un disparo que rebotó en la zaga madridista. La suerte le sonrió a un Conquense que veía cómo la desviada trayectoria del balón sorprendía al portero merengue, significando el 1-1 en el minuto 69.
Pujó el Real Madrid C, al que no le valía el empate: Bruno probó fortuna con una buena ejecución de falta que se marchaba cerca de la portería mientras que el Conquense dormía el partido y buscaba las últimas a la contra.
Menos intensidad en el tramo final, firmando ambos equipos las tablas a 1. La Balompédica sumaba así ese punto que necesitaba para sellar la permanencia definitivamente –escapando también del puesto de playout-, por lo que jugadores, cuerpo técnico y afición respiraban aliviados tras el pitido final.
Abrazos, firmas, entrega de premios –la Peña Mirando pa’ Cuenca ha designado a Pablo Olivares como el mejor jugador de la temporada-, fotos y emociones se apoderaban de La Fuensanta, como es normal al final de curso. Con los deberes muy bien hechos en su primera temporada en Segunda RFEF, el Conquense se despide así de La Fuensanta hasta otra emocionante temporada. Les queda un último compromiso liguero: la visita al Unión Sur Yaiza la próxima semana.
