La UB Conquense ha puesto punto y final a su temporada en el Virgen de la Caridad, donde ha empatado a 1 ante el CP Villarrobledo. Los blanquinegros comenzaron adelantándose mediante su capitán, Iván Rubio, aunque los villarrobletanos, con más en juego que sus rivales, tiraron de garra en la segunda mitad para igualar el encuentro.
Empezó bien el Conquense y no tardó en reflejarlo en el marcador: minuto 12 Marco Recuenco se inventaba una buena jugada para enviar un balón al segundo palo que remataba Iván Rubio, entrando en carrera, para el 1-0. Replicó el Villarrobledo con un potente saque de falta que Álvaro Hormiga despejó en una acertada acción.
Mantuvo bien el temple el equipo blanquinegro, que todavía tuvo alguna opción más para aumentar la ventaja: Jairo, en un saque de falta después de que le dejasen el balón botando, casi sorprende desde muy lejos.
En la segunda parte dio un paso adelante el CP Villarrobledo, algo normal en vista de que se estaban jugando la permanencia –pues un posible arrastre de 2ª RFEF podría afectarles-. Acertado de nuevo estaba Hormiga para desviar un balón a quemarropa que se topaba con el palo antes de que Parera lo mandase a volar.
No obstante, el empate llegaba en el 60: un saque de esquina llegaba a la frontal del área, donde Kevin batió a Hormiga con un disparo raso. 1-1 y todavía quedaba pescado por vender.
Antonio Fernández casi aprovecha una contra para anotar el segundo, pero no conectó bien con el cuero. Tiró de casta el cuadro local, que se vino arriba y se topó con el palo en la mejor acción en lo que quedó de partido. Finalmente, el marcador se quedaba con resultado de 1-1.
Con 73 puntos acaban finalmente los blanquinegros, una enorme cifra como fruto de 21 victorias, 10 empates y tan solo 3 derrotas. El primer equipo del Conquense se va de vacaciones hasta la próxima campaña, la cual está ahora tristemente siendo objeto de conjeturas debido a esa desavenencia que mantienen club y Ayuntamiento de Cuenca por el uso de La Fuensanta. Sea como sea, acaba una gran temporada para la Balompédica y, cuando vuelva a su casa, se espera y desea que sea con motivo de alegría para todas las partes.