El Ciudad de Cuenca logró un punto con sabor agridulce en un empate sin goles ante el Alzira. A pesar de la entereza del rival (6º clasificado y uno de los equipos con mejores registros de la categoría), el choque fue un monólogo conquense en que buscó por todas las maneras un gol que corroborase en el marcador el dominio que los pupilos de David Angulo tuvieron sobre el césped.
Antes del partido, los jugadores del club conquense tuvieron el gran detalle de salir con una camiseta en apoyo a Nacho, jugador que fue intervenido la semana anterior por su lesión en el menisco y ligamentos. A él, Angulo contó con varias bajas, incluidas la de su delantero Adrián. Para recomponer el plantel, el técnico del ascenso morado tiró del filial, con la incorporación de Antonio y Roberto.
Ni Karim, ni Loro, ni Borja ni ninguno de sus compañeros fueron capaces de romper la maraña defensiva del rival valenciano que sólo ofreció un par de ocasiones claras en el vendaval de oportunidades locales. Un hecho con mérito después de todo, contando con las importantes ausencias en la plantilla del conjunto juvenil.
Por su parte, David Angulo, valoró el punto por el ímpetu de su equipo: "Estamos muy contentos, merecimos más que un empate a cero, concedimos muy poco y tuvimos muchas ocasiones, estando volcados en ataque durante los últimos quince minutos y el Alzira encerrado atrás. El equipo jugó bien, tuvo carácter y fue valiente, dimos una imagen muy distinta a otros partidos incluso en los que resultados ganadores. Creo que jugado así tenemos opciones de salvarnos", declaró el entrenador.
El Ciudad de Cuenca sigue en penúltimo lugar, pero a sólo tres puntos de la permanencia. La próxima semana el equipo conquense viajará a Lorca para medirse al conjunto anfitrión, que no gana en su campo desde el 17 de noviembre de 2018.
